Durante la administración de Luis Raúl González Pérez, en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) hubo un dispendio tremendo de los recursos económicos, destinado sobre todo a los salarios de altos funcionarios y a la manutención de plazas laborales que nadie cubría realmente, muchas obtenidas por nepotismo.

Así lo afirmó la ombudsperson nacional, Rosario Piedra Ibarra, quien señaló que aunque los recursos manejados de forma presuntamente irregular ascienden a millones de pesos, no considera presentar ninguna denuncia, porque su objetivo es hacer más eficiente a la institución, no enfrascarnos en una batalla inútil.

En entrevista con La Jornada, la funcionaria detalló que, tras analizar cómo se ejercieron los fondos de la comisión durante la gestión de González Pérez, se documentaron gastos excesivos.

Hemos encontrado un dispendio tremendo, porque el presupuesto se usaba principalmente en los salarios de los altos funcionarios. También había irregularidades porque se decía que había equis persona en un puesto de director de área, con un salario muy grande, pero no se encontraba ahí, indicó.

Vimos también que un mismo puesto, de investigador o de asesor, tenía salarios muy dispares: uno de 70 mil pesos y otro de 14 mil, por ejemplo; y aquí no habrá investigadores de primera ni de segunda. Todos tienen que cumplir con su función, expresó.

Otro caso significativo es el de la chef, que no era chef en realidad, y que aparecía como directora de área, con un salario muy alto, y era exclusiva para el presidente de la comisión. También nos encontramos pisos vacíos en las siete o más sedes que tiene la CNDH en la Ciudad de México, mientras aparte se contrataban bodegas para algunas cosas.

Tras señalar que su administración está documentando con exactitud todas las supuestas irregularidades, porque no podemos hablar a la ligera, la titular del organismo autónomo señaló que había familias enteras que eran discrecionalmente contratadas por nepotismo, a través de conocidos y amigos.

▲ Rosario Piedra Ibarra, titular de la CNDH.Foto Luis Castillo

–¿Ya hay un cálculo de cuánto dinero estuvo involucrado en estos malos manejos?

–Sí, sí tenemos cálculo de lo que hemos ya empezado a ahorrar y estoy hablando de millones.

–¿Y todos estos ahorros se derivan de lo que usted me dice?

–Entre 20 y 30 por ciento del presupuesto es lo que ya hemos detectado –indicó.

Acerca de si su administración pondrá alguna denuncia por las supuestas irregularidades, Piedra indicó que no lo considera, porque aquí tratamos de que esto funcione lo mejor posible, no en enfrascarnos en una batalla inútil o en buscar venganzas o chivos expiatorios. Estamos priorizando que la comisión funcione para lo que fue creada.

Sobre la forma en que se restructurará la CNDH, la ombudsperson indicó que una de las áreas donde comenzará el proceso es comunicación social, en que había casi 200 empleados, muchos de los cuales duplicaban funciones con otros compañeros, lo que provocaba una mala utilización de los recursos.

Esta reingeniería la hemos hecho gradualmente, para que la Comisión no deje de funcionar; lo hemos hecho por nuestros beneficiarios, que son las víctimas, y por eso hemos cuidado este proceso, con asesores legales para no incurrir en ninguna equivocación, recalcó.

Por otro lado, Piedra señaló que las visitadurías del organismo a su cargo seguirán funcionando a través de la figura de los directores generales, la cual está prevista en la ley cuando el visitador titular está ausente, para poder incorporar a la institución a luchadores sociales y víctimas cuya trayectoria los avale.

Consultado vía telefónica sobre los señalamientos de la actual titular de la CNDH, Luis Raúl González Pérez, hoy coordinador del programa de derechos humanos de la UNAM, señaló que por el momento no hará declaraciones a los medios.