Primer bimestre del año
Sábado 22 de febrero de 2020, p. 18
Las exportaciones e importaciones de China caerán bruscamente en enero y febrero, ya que el brote del nuevo coronavirus está interrumpiendo gravemente la actividad en la segunda economía más grande del mundo, afirmó ayer el Ministerio de Comercio, el cual agregó que se están estudiando más medidas para apoyar a las empresas.
Con restricciones de transporte aún vigentes en el país para contener la propagación del virus, muchas compañías luchan por reanudar la producción, debido a la escasez de trabajadores y materias primas, mientras otras no pueden sacar sus productos terminados.
La falta de piezas está afectando las cadenas de suministro en todo el mundo. El país asiático es el mayor exportador global de bienes, con envíos que representan casi 20 por ciento de su producto interno bruto (PIB).
Analistas pronostican que el impacto de oferta y demanda podría reducir el crecimiento del PIB del primer trimestre a la mitad del 6 por ciento registrado en el periodo anterior.
China anunció que reducirá los aranceles que había impuesto a unos 60 productos estadunidenses a partir del 28 de febrero, algunos relacionados con la lucha contra la epidemia del coronavirus y que fueron impuestos en plena pelea comercial entre Washington y Pekín.
La comercialización de autos se desploma
Las ventas de automóviles de pasajeros en el gigante asiático cayeron 92 por ciento anual en los 16 primeros días de febrero, según la Asociación de Autos de Pasajeros de China (CPCA, por sus siglas en inglés), ya que el brote del nuevo virus frenó los negocios en todo el país.
En los primeros 16 días del mes las ventas fueron de 4 mil 909 unidades, por debajo de las 59 mil 930 del mismo periodo del año anterior, según datos de la CPCA.
Se trata de las primeras cifras que demuestran la dureza con que está golpeando la epidemia el mayor mercado automovilístico mundial.
En Brasil 57 por ciento de empresas de tecnología enfrentan problemas para recibir suministros de China, de acuerdo con una encuesta de la Asociación Brasileña de las Industrias Eléctrica y Electrónica.
El país sudamericano es altamente dependiente de la compra de insumos del país asiático. China es su mayor socio comercial.