La organización Fuerza Amplia de Transportistas (FAT) detuvo las protestas y movilizaciones tras el acuerdo con la Secretaría de Movilidad (Semovi), a cargo de Andrés Lajous, de apoyarlos con un subsidio de 4 mil pesos al mes para mantener las tarifas sin aumento, entre otras medidas.

El programa de bonos de combustible en apoyo a los usuarios, por medio del cual se otorgará la ayuda económica al concesionario que cumpla con la regularización de sus documentos, es el reconocimiento de las autoridades de que la actual tarifa es insuficiente para los transportistas.

Nicolás Vázquez Figueroa, representante de la FAT, señaló que tanto el gobierno de la Ciudad de México como los afiliados a la organización tuvieron que ceder en la negociación del pasado martes 18, por eso respetarán sus compromisos y estarán atentos de que los beneficios sean reales para nuestros compañeros que no queden únicamente en buenos deseos y un mero anuncio que no se llegue a cumplir.

Los concesionarios hicieron públicos los acuerdos a los que llegaron el pasado miércoles con la Semovi y manifestaron que es el inicio de un trabajo que se mantendrá durante cinco meses de negociaciones, porque su aspiración es ver de qué manera se va a dar el incremento a la tarifa u otro subsidio.

Expusieron que se establecieron cuatro ejes de trabajos y mencionaron como prioritarios la sustitución de unidades, a partir de las que tienen 25 años de antigüedad, la apertura de ventanillas para la regularización de los documentos de concesión, la dignificación de los operadores con la prestación del servicio de salud en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el subsidio mensual de 4 mil pesos por los siguientes cinco meses.

Los conductores deberán portar de forma permanente el uniforme con el logotipo de la ruta o empresa en la que presten su servicio y deberán participar en los programas de profesionalización que incluyen áreas como capacitación y sensibilización.

Sobre la regularización y supervisión de concesiones, esperarán la apertura de las ventanillas de trámites, que han estado cerradas por varios meses, no sólo en esta administración, sino también en las anteriores.

Los que cumplan con el ordenamiento podrán contar con su concesión en los términos marcados por la Constitución capitalina, es decir, serán renovadas de acuerdo con los lineamientos que ya estaban establecidos al momento en que se les dio la primera vez.