Integrantes de colectivos feministas se manifestaron ayer por la mañana frente a Palacio Nacional para exigir que el presidente Andrés Manuel López Obrador y su gobierno reconozcan la gravedad de los feminicidios en México y actúen para detener este flagelo, como parte de una jornada de movilizaciones que incluyó pintas a la Puerta Mariana del recinto histórico, a la cual trataron sin éxito de prenderle fuego.

Alrededor de las 6:30 de la mañana arribó a Palacio un grupo de alrededor de 40 manifestantes –la mayoría con el rostro cubierto– que coreaban consignas como Ni una más, ni una asesinada más y Justicia sí, rifa no, en alusión a lo declarado por López Obrador, de que el tema de los asesinatos de mujeres interfiere con el del avión presidencial.

En pancartas también reclamaron por lo que consideran abordaje amarillista de los medios informativos sobre los feminicidios, y destacaron que en el reciente caso de Ingrid Escamilla algunos periódicos decidieron lucrar con las imágenes de la víctima con tal de generar morbo y ganar dinero.

Luego de escribir consignas en la Puerta Mariana de Palacio Nacional, lanzarle globos con pintura y tratar en vano de encenderle fuego, las manifestantes dieron lectura a un comunicado en el que lamentaron que en un país donde en promedio 10 mujeres son asesinadas al día, para la sociedad y el gobierno nosotras seamos la pesadilla, porque así son nombradas en los medios de comunicación.

Da rabia que nuestro jefe de Estado sólo haga mención de los feminicidios para decir que no quiere que le opaquen la rifa del avión o que en la entidad con mayor número de feminicidios el gobernador Alfredo del Mazo se mantenga omiso, invisible, cómplice. Da rabia cómo asesinaron a Ingrid (Escamilla) y cómo los medios difundieron su imagen, recalcaron.

Cuando ya habían transcurrido tres horas y media de la jornada de protesta, una comisión de 12 activistas fue recibida por la directora de Atención Ciudadana de la Presidencia de la República, Leticia Ramírez, a quien plantearon diversas demandas, entre ellas que López Obrador se disculpe por menospreciar el tema de los feminicidios y se sancione a los medios que difundan imágenes amarillistas.

Cerca de las 11 horas, las manifestantes salieron del encuentro y denunciaron que los funcionarios con los que hablaron no tomaron en serio sus demandas y no tenían capacidad resolutiva.

Estamos ante un acto más de simulación por parte del gobierno. Leticia Ramírez únicamente nos invitó a su sala para escucharnos durante más de una hora y decirnos que ella no tiene absolutamente ninguna atribución para darnos respuesta, aseguraron.