La Secretaría de Relaciones Exteriores destituyó al titular del Instituto de Mexicanos en el Exterior (IME), Roberto Valdovinos, en atención a recomendaciones del Comité de Ética y Prevención de Conflictos de Interés.

El año pasado el comité recibió cinco denuncias en contra de Valdovinos, de las que confirmó la consistencia de los hechos denunciados como trato inadecuado y hostigamiento laboral.

A mediados de enero La Jornada dio a conocer la existencia de quejas por posible hostigamiento laboral, presentadas ante el comité por colaboradores del IME. Asimismo, se informó que una querella fue presentada el 24 de abril del año pasado en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y existe una demanda laboral ante el Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje.

De acuerdo con lo relatado en el expediente CNDH/6/2019/3227/Q, “el titular del IME no respeta los derechos humanos ya que trata al personal, principalmente femenino, de manera grosera, ofensiva, denigrante y humillante, creando un ambiente hostil.

Esta actitud hace que se respire enojo, tristeza, frustración y desesperanza (sic), con el propósito de que los empleados que ya llevan tiempo renuncien, o sin motivo justificado les pide la renuncia bajo el argumento que ya tiene quien le va a suplir.

La notificación

El funcionario fue notificado de su destitución ayer cerca de las 11 horas y casi siete horas y media después dejó las instalaciones de la Secretaría de Relaciones Exteriores en la parte trasera de un vehículo marca Toyota, tipo Corolla, color plata, escondiendo el rostro a la prensa.

Horas antes de su salida –rondando las 14:30– este medio lo buscó para conocer su postura, mientras conversaba en la recepción de la cancillería con una persona que portaba una cámara de video; sin embargo, declinó ofrecer comentario alguno y se retiró visiblemente molesto hacia los elevadores para regresar a las oficinas del IME ubicadas en el piso 17.

En más de una ocasión, diversas personas se acercaron al módulo de registro de la SRE pidiendo subir con Valdovinos, pero través de llamadas por radio de comunicación y telefónicas se dio la orden de que ninguna persona podía ingresar, a excepción de sus familiares directos.

La dependencia, a cargo de Marcelo Ebrard Casaubon, informó ayer que los derechos de Valdovinos fueron respetados en todo momento, incluyendo la garantía de audiencia y un estricto apego al debido proceso en cada una de las acusaciones que se presentaron ante el comité, que también veló sistemáticamente por los derechos de las víctimas, en defensa de su privacidad e integridad.

La cancillería reivindicó su compromiso con una política feminista, que además de promover la eliminación de las diferencias estructurales, brechas y desigualdades de género, impulsa una secretaría paritaria y segura para todas y todos.