El ex sacerdote Fernando Martínez Suárez, quien perdió el estado clerical porque el Vaticano lo reconoció culpable de abusar sexualmente de menores de edad, continuará viviendo en Italia con la protección de los Legionarios de Cristo y recibiendo su pensión, debido a que la Iglesia le permitió seguir formando parte de dicha congregación, señaló David Peña Rodríguez, abogado que acompaña a algunas de las víctimas.

En entrevista, dijo que esta resolución que se dio a conocer el pasado lunes es indignante porque el agresor sigue teniendo todos los privilegios de pertenecer a ese grupo religioso. Además, agregó, que el Vaticano decida separarlo del estado clerical no tiene ninguna repercusión, pues Martínez Suárez, de 80 años de edad, ya no oficia misas.

Un informe realizado el año pasado por la agencia internacional Praesidium Inc., a petición de los Legiones, concluyó que Martínez Suárez abusó de por lo menos ocho menores.

Peña Rodríguez indicó que cuatro de las víctimas del ex cura ya tienen preparada denuncias penales por violación equiparada y abuso sexual, que presentarán ante la Fiscalía de Quintana Roo, pues fue en Cancún, en los años 90, donde se perpetraron las agresiones.

El también integrante del Grupo de Acción por los Derechos Humanos y la Justicia Social explicó que actualmente el Código Penal de dicha entidad contempla la imprescriptibilidad de este tipo de delitos. Pero no así cuando sucedieron los hechos (años 90). Es justo parte del litigio que se tiene que desarrollar.

Señaló que en el proceso legal se reflejará si los legionarios de Cristo realmente tiene un interés de colaborar con las víctimas, de aportar toda la información, documentos, materiales para poder comprobar los delitos.