Ante el problema de la inseguridad, mandatarios estatales y gobierno federal ofrecieron conducirse con respeto mutuo y neutralidad política.

Durante la reunión de la Comisión de Seguridad de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) con integrantes del gabinete, el secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, señaló que el acuerdo fue cerrar filas y crear un solo frente para combatir al crimen.

Se acordó revisar los protocolos de armas, con el fin de atajar el robo y mal uso de los artefactos de corporaciones policiales y fijar lineamientos de las coordinaciones regionales y mesas estatales para evitar acusaciones y gestiones infructuosas.

Durazo ofreció que los policías federales que no deseen incorporarse a la Guardia Nacional (GN) puedan darse de baja temporal y ser contratados por las corporaciones estatales. En cuanto al trabajo conjunto, admitió que las coordinaciones regionales no podrán trabajar sin los liderazgos estatales. Acordaron que en lo posible se enviarán a estas instancias responsables de alto nivel.

A raíz de que el viernes pasado en Torreón, Coahuila, un menor introdujo a su escuela y accionó pistolas que tomó de su casa, se comentó –según algunos asistentes– que no hay resguardo y muchas veces los policías se llevan las armas a su domicilio. Se informó que cada día habría, en promedio, una o dos armas extraviadas, por lo que ascendería a 5 mil la cifra de artefactos perdidos. Acerca de la introdución ilegal de armas, el tema será tratado esta semana con funcionarios de Estados Unidos.

La participación sin posiciones políticas tomó relevancia cuando algunos mandatarios expresaron su inconformidad porque en Palacio Nacional hay señalamientos públicos de la actuación de tal o cual gobierno local.

Temprano, se reunieron con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien les pidió fortalecer las acciones de prevención de adicciones, uno de los programas centrales de la estrategia del presidente López Obrador.

Luego acudieron a un hotel cerca de la Alameda Central, donde el eje de las conversaciones y acuerdos fue quitar, en ambos niveles de gobierno, banderas políticas.

El presidente en turno de la Conago, el queretano Francisco Domínguez, se refirió a la importancia del diálogo permanente, la crítica, la autocrítica y el debate responsable.

En su turno, tras informar que la GN tiene 75 mil 762 elementos y este año reclutarán a 21 mil 170 y se crearán otras 50 regiones, Durazo los llamó de nuevo a trabajar unidos, en tolerancia, ajenos a intereses coyunturales o consideraciones ideológicas, y sin sutilezas teóricas si se trata de un delito del fuero común o federal, porque no podemos delegar la responsabilidad en el otro.

Llamó a enfrentar el reto y avanzar a partir de alternativas tomadas por consenso, porque queda claro que el único camino es trabajar juntos o fracasar por separado.