Domingo 12 de enero de 2020, p. 20
Oaxaca, Oax., Combatir el estigma de que los jueces liberan delincuentes; contrarrestar la burocracia mediante una mecanismo electrónico de atención directa y humanizar y eficientar el sistema de justicia de la entidad, son algunos de los retos que se ha propuesto Eduardo Pinacho Sánchez, nuevo presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) del Estado, nombrado apenas el lunes pasado.
En Oaxaca hay 153 juzgadores públicos, a quienes es necesario dar capacitación en materia de sensibilización de los derechos humanos para que puedan disponer de herramientas y habilidades más idóneas para resolver y dar sentencias.
El magistrado sostiene que los próximos cuatro años (2020-2024) las sociedades, y no es excepción para Oaxaca, sigan en crisis de valores; sin embargo buscará impulsar la capacitación y sensibilización de los servidores judiciales.
El magistrado precisó que las denuncias que se han disparado en los años recientes en la entidad son feminicidios, violencia intrafamiliar y homicidios, los cuales son resultado de la crisis de valores que se vive en todo México.
Índices delictivos, un tanto moderados
No obstante, dijo, los índices delictivos han sido un tanto moderados comparado con otras entidades, por eso es necesario crear la vinculación entre órganos como la Fiscalía General de Justicia del Estado, la Defensoría Pública y la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca, pues sólo unidos y con un trato humano podremos vencer cualquier situación delictiva
.
Pinacho Sánchez dejó en claro que la función jurisdiccional que ahora plantea como titular de este órgano de justicia va encaminado a privilegiar los derechos humanos y dar rostro a los expedientes.
Recalcó que ello pondrá fin a situaciones en las que se ha vinculado o criticado a jueces; por ejemplo, que dejan libres a presuntos culpables
, a lo que dijo que como en todo no es bueno generalizar, sino más bien que se entienda que muchas veces los jueces actúan porque las autoridades fiscalizadores no investigan bien
, entonces no queda de otra que dar una resolución absolutoria o con efectos liberatorios.
Esperan de mí que cumpla con esa obligación y deber de impulsar un sistema de justicia mayormente humano; esa es mi prioridad y se cumplirá
, sentenció.
Con 34 años de carrera en este órgano, el presidente del tribunal señaló la necesidad de dar rostro y vida a los expedientes
; es decir humanizar el sistema judicial y contrarrestar la burocracia creando un órgano de atención directa que de forma tentativa ha pensado nombrarlo Tribunatel.
Será un enlace directo vía telefónica entre el pueblo y especialistas en materia de justicia con el único fin de atender directamente y sin mayor atraso trámites y atenciones a la sociedad que lo requiera y así se desahogarían las trabas que actualmente vive el sistema judicial.