Buenos Aires. La madrugada de ayer, tras 12 horas de debate, la Cámara de Senadores aprobó la Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva, para enfrentar la emergencia económica, por 41 votos a favor, 23 en contra y una abstención, y sería promulgada por el Ejecutivo rápidamente.

Es la medida más importante no sólo para paliar la grave situación social, sino para reactivar la economía mediante nueve acciones de emergencia económica, social, sanitaria, energética y tarifaria. Las acciones fueron rechazadas por la alianza derechista Juntos por el Cambio, que intenta negar la crisis en que se encuentra el país, después de cuatro años de gobierno del ex presidente Mauricio Macri, quien viajó a Qatar para tomarse vacaciones.

El viernes la Cámara de Diputados, después de una sesión de más de 18 horas, votó el proyecto de ley enviado por el gobierno del presidente Alberto Fernández, pero se atrasó su tratamiento en el Senado para dar tiempo a la revisión del texto y las modificaciones sugeridas.

En tanto, se aprobó por 63 votos a favor, uno en contra y una abstención, un nuevo pacto fiscal acordado por el presidente con los gobernadores, lo que permite suspender un acuerdo que regía desde 2017, el cual redujo la recaudación de impuestos a las provincias en desmedro de las economías locales y en favor del gobierno nacional.

Los legisiladores de Juntos por el Cambio intentaron dejar sin quorum la sesión del Senado, como primer obstáculo, pero el oficialismo logró habilitar el tratamiento de la ley con 38 senadores que suman 52 por ciento del total.

La oposición decidió incorporarse para dar el debate dentro de los mismos términos de negar la necesidad de la emergencia, y hubo importantes discursos como el del oficialista Carlos Caserío, de Córdoba, quien sostuvo que se estaba ante una situación realmente grave y por eso se recurrió a la emergencia. El objetivo es poner en movimiento una Argentina que no avanza.

Añadió que la misión del gobierno ante esta situación es hacer un equilibrio. Ayudar a los más vulnerables. Les pedimos un esfuerzo a todos los que sabemos que pueden dar más. Es el esfuerzo solidario que hace falta para poder equilibrar la macroeconomía.

Por parte de la oposición, el senador Esteban Bullrich consideró que era un día triste para el bloque de Juntos por el Cambio porque, desde su punto de vista, se ignoran las instituciones y se convierte a este Senado en una herramienta inútil para la construcción de consensos”.

Varios de sus colegas le recordaron las medidas que tomó Macri en 2015, cuando por decreto fue decapitando entidades, como la Ley de Medios, hasta alcanzar a finales de enero, casi 200 decretos de necesidad y urgencia.

Se discutieron puntos del proyecto, como el impuesto a los bienes personales, que faculta al Ejecutivo a gravar a los que tienen bienes en el exterior. Nosotros hablamos mucho de que nos faltan dólares, pero no nos faltan. Los dólares de los argentinos están afuera. Un informe público de la Agencia Federal de Impuestos Públicos, de 2017, indicó que hay 37 mil residentes argentinos que tienen un total de 72 mil millones de dólares en fondos especulativos, explicó el senador Oscar Parrilli del Frente de Todos.

Agregó que, en este caso, se pondría un impuesto que va a significar para el Estado una recaudación de casi 2 mil millones de dólares. La mejor solidaridad que pueden tener estos argentinos es traer la plata al país, porque no sólo van a dejar de pagar el impuesto, sino que también van a ayudar para que la Argentina comience a salir de este problema.

Por su parte, José Mayans, jefe del bloque del Frente de Todos en el Senado, recordó “lo que hicieron (los ahora opositores) con el tema del Banco Central; el endeudamiento es traición a la Patria y ahora escucho que todo lo que estamos haciendo está mal y dicen que todo lo que hacía Macri estaba bien. Entonces, digo ‘vamos por el camino correcto’”.

Mediante la ley de emergencia económica se autoriza al Ejecutivo a intervenir el Ente Regulador de la Electricidad (Enre) y el Ente Regulador del Gas (Enargas), y además habilita al gobierno a congelar las tarifas de electricidad y gas por un plazo de 180 días, mientras se inicia un proceso de renegociación de la Revisión Tarifaria Integral que vige en este momentos.

El tarifazo fue uno de los golpes más duros para la población ya que en tres años subieron hasta 3 mil 500 por ciento, haciendo impagable las facturas, por lo cual miles de empresas y negocios cerraron sus puertas. Todos los sectores de la economía están en emergencia.