Monterrey, NL., El Congreso de Nuevo León aprobó ayer la Ley de Movilidad, la cual estipula que el transporte público del estado deberá ser sustentable, los municipios darán prioridad a la infraestructura ciclista y peatonal, se aprobará una tarjeta única para pagar metro, camión y taxis, así como eliminar el acoso a las mujeres en estos servicios.

La norma fue aprobada en lo general con 39 votos a favor; sólo tres legisladores se abstuvieron: el panista Luis Susarrey, quien se excusó por tener un negocio de taxis privados; Claudia Tapia, de la bancada Independiente Progresista, y Melchor Heredia, de Morena, ausentes en la votación.

Los legisladores reservaron 20 artículos de los más de 200 de la ley, pues no pudieron llegar a un acuerdo tras 14 meses de discusión.

La nueva normatividad prevé la desaparición de la Agencia Estatal del Transporte para ser reemplazada por el Instituto de Movilidad y Accesibilidad, que tendrá una junta de gobierno, a fin de permitir una mayor participación ciudadana.

El nuevo organismo trabajará de manera coordinada con el Instituto Estatal de las Mujeres con la finalidad de eliminar el acoso en el transporte público.

También se prevé crear una tarjeta de movilidad única para todo el transporte público local, es decir, Metrorrey, Ecovía, camiones y taxis.

Se indica además que las licitaciones para asignaciones de rutas de transporte serán abiertas y que camiones y taxis usen gas natural. En 2019 se han declarado ocho contingencias ambientales por mala calidad de aire en la zona metropolitana de Monterrey.

Para combatir los atropellos de ciclistas (en cuatro meses han muerto 10 en accidentes), en la ley se estipula que cada municipio deberá impulsar la creación de carriles exclusivos para ese medio de transporte.