Manila. Al ser preguntado sobre la situación en Filipinas, el cantante irlandés Bono subrayó que en ninguna circunstancia, ni en nombre del progreso, los derechos humanos pueden ser puestos en entredicho.

A veces la gente piensa que los derechos humanos se pueden ver comprometidos en nombre del progreso. Yo diría que no se pueden comprometer nunca. Ese es mi sutil mensaje para el presidente Rodrigo Duterte, dijo Bono ayer antes del primer concierto de U2 en Manila.

El cantante, miembro de Amnistía Internacional y crítico de la guerra contra las drogas que lleva a cabo Duterte, aseguró que las garantías individuales son algo que toma muy en serio.

El mandatario libró una guerra mortal contra las drogas que ha cobrado miles de vidas. Respaldados por los filipinos, pero condenados por críticos que dicen que se trata de crímenes de guerra, los asesinatos cometidos por la policía y por sospechosos desconocidos son objeto de una investigación preliminar que realiza el fiscal de la Corte Penal Internacional.

Duterte, elegido en 2016, afirmó que eliminaría a 100 mil criminales. También prometió indultos a los policías en caso de ser procesados por cumplir con los operativos.

El líder de grupo U2, en Manila para un concierto el miércoles, explicó que no tiene planes de reunirse con el mandatario filipino. El grupo está en Asia para su Joshua Tree Tour 2019, que terminará en la ciudad india de Mumbai el domingo. Los conciertos anteriores tuvieron lugar en Brisbania, Adelaida, Melbourne, Sydney y Perth, así como Singapur, Tokio y Seúl.

La guerra contra las drogas de Duterte ha matado a miles de presuntos traficantes y usuarios.