El director técnico Luis Alfonso Sosa, quien está a la espera de que la directiva del Necaxa le confirme una oferta de trabajo, resaltó que la Liga Mx no es fácil para los estrategas foráneos, y por ello los recién llegados, el argentino Pablo Guede, del Morelia, y el uruguayo Guillermo Almada, de Santos Laguna, pagaron con la eliminación su desconocimiento.

Hay un torneo regular que básicamente se juega para clasificar, y luego la liguilla es otro muy diferente. Tienen que entender cómo se juegan los campeonatos mexicanos, expresó Sosa, quien considera que la del Apertura 2019 fue “una liguilla muy intensa. Diferente a las demás.

“En la fase final ya no pasa tanto por lo táctico, sino por los estados emocionales y el que es capaz de controlarlos tiene más posibilidades de éxito. La táctica se rompe muy fácil, quizás es un poco más táctico el primer partido; en cuartos de final lo vimos con encuentros más abiertos, de ida y vuelta. En el Azteca fue estratégico el América-Tigres, y cuando jugaron en el Volcán resultó muy emotivo”, comentó.

Precisó que está esperando la confirmación del club hidrocálido, del que emigró el técnico Guillermo Vázquez. Estoy contento porque me toman en cuenta, pero hay que esperar que se confirme, y una vez más pidió oportunidades serias para los técnicos locales: necesitamos que se nos abran más puertas, reclamó.

Aplaudió el buen trabajo de Vázquez, de Víctor Vucetich, de Miguel Herrera y de Ignacio Ambriz, quienes avanzaron a cuartos de final con sus respectivos clubes. “Uno pensaría que los que más invierten están listos para arrasar, ser favoritos y estar en los primeros lugares, pero se está comprobando que no es así. El dinero no garantiza nada; el trabajo bien hecho y la estructura sólida es lo que te permite competir.

A los técnicos mexicanos nos toca hacer muchos más méritos que a la gente de afuera. Han pasado por acá cualquier cantidad de foráneos y nos van tapando esas opciones. A nosotros nos queda la obligación de seguirnos preparando, siempre con la ilusión de que llegue una oportunidad seria que implique el tiempo necesario para estructurar y planificar bien.