Sábado 7 de diciembre de 2019, p. 21
Ante la posibilidad de que los negociadores mexicanos y estadunidenses pacten cambios al Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), el Senado se mantendrá en alerta este fin de semana, ya que toda modificación debe ser conocida y avalada por esa cámara del Congreso, manifestó ayer el coordinador de Morena, Ricardo Monreal.
El también presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) dijo que el canciller Marcelo Ebrard le informó que ayer por la tarde los negociadores mexicanos se reunieron en Washington con Nancy Pelosi, lideresa de la Cámara de Representantes, y con legisladores demócratas.
Por ello no descartamos una reunión extraordinaria
de la Jucopo en las horas próximas, ya que nuestra petición es que no se firme nada antes de que lo conozca el Senado ni se llegue a ningún entendimiento hasta que esa cámara tenga la valoración de la probable modificación o adición”, ya sea a través de cartas paralelas, adendum o propuestas de modificación.
Aclaró que el Senado cerrará trabajos el próximo día 12, pero puede llamar a un periodo extraordinario si este mes o el próximo se requiriera aprobar cambios al T-MEC, que esa cámara ya ratificó.
Sin embargo, destacó que de no lograrse la ratificación del T-MEC este mes o a principios de enero de 2020 lo más probable es que pueda demorarse hasta 2021.
De no aprobarse en esas fechas, tampoco se va a acabar el mundo
ni México se va a ver en la incertidumbre económica y comercial, ya que se seguiría aplicando el TLCAN, el cual está vigente”.
Reveló que, como líder del grupo mayoritario en el Senado, está al tanto de la negociación y las propuestas de cambio de los demócratas, la Cámara de Representantes y los sindicatos estadunidenses. De entrada, aseveró que está absolutamente en contra de la pretensión de incorporar al T-MEC un mecanismo de verificación en materia laboral, ya que implica un riesgo para la soberanía y la competitividad del país.
Otras modificaciones se refieren a disposiciones ambientales, a mecanismos de solución de disputas y para la protección de patentes de medicamentos. Además, algo del contenido de aluminio y acero que el gobierno mexicano analiza. Se trata, recalcó, de modificaciones que tienen distinta lógica, tanto política como electoral
.
La propuesta más discutida es este mecanismo de verificación y certificación del cumplimiento de los compromisos laborales en fábricas y empresas mexicanas
, lo que dejaría al país en clara desventaja frente a Estados Unidos, que podría aplicar unilateralmente medidas basadas en información emitida por los verificadores extranjeros, sin que necesariamente se tenga que comprobar fehacientemente la supuesta violación”.