Juchitán, Oax., Nueve meses después de haber recibido una tarjeta de apoyo para personas con discapacidad, Ofelia García Jiménez, abuela de Héctor, un niño de 11 años de edad con parálisis cerebral, no ha podido cobrar porque el plástico que le entregaron los enviados de la Secretaria de Bienestar no tiene fondos.

Para Ofelia, los 2 mil 550 pesos del programa para cada discapacitado serían de gran apoyo, puesto que su hija, la mamá de Héctor, padece retraso mental.

José Luis Jiménez Castillo, coordinador de la subdelegación regional del programa del gobierno federal en Juchitán, confirmó que de los 6 mil beneficiarios del programa en los 19 municipios de la región, 4 mil ya fueron beneficiados y 2 mil aún están en análisis.

El retraso en la entrega de los recursos, dijo, se debe a que aún se está dando el cambio de modalidad de pago en efectivo a tarjetas bancarias Bansefi. Sin embargo, dijo que 250 personas con discapacidad han reportado que no han recibido depósitos bancarios y otros no han sido validados, por lo que exhortó a las personas a que acudan a las oficinas donde se les ha atendido en forma personal.

Ofelia, junto con un grupo de padres de familia y personas con discapacidad, se manifestaron en el Monumento a Los Héroes del 5 de Septiembre, en Juchitán, donde denunciaron falta de atención de las autoridades estatales encargadas de esos programas federales.

Allí, Noel Martínez López y Juan Galván Blas, presidentes de Marchando Sobre Ruedas AC y de Una Obra Maravillosa, ambas de personas discapacitadas, recordaron que entre marzo y abril de 2019 los llamados servidores de la nación entregaron casa por casa las tarjetas Bienestar y aseguraron que en un plazo de 15 a 20 días ya tendrían fondos.

Sin embargo, tenemos un registro de aproximadamente mil 400 personas discapacitadas, de las cuales 980, aproximadamente 70 por ciento, no han podido cobrar el beneficio, aun cuando tienen sus tarjetas, o los borraron de las estadísticas, como a Héctor, dijo Noel.

Exhortaron a los responsables, en especial a Modesta Fuentes, subdelegada regional del programa de desarrollo, a incluir a las 980 personas que no han podido recibir sus apoyos.

Un caso similar al de Héctor es el de Yesenia Santiago Ruiz, de 38 años, madre de dos menores discapacitados, una de 14 y otro de ocho años de edad, quienes tampoco han recibido ayuda.