Segundo trimestre consecutivo
Martes 26 de noviembre de 2019, p. 25
Por segunda ocasión consecutiva, ahora en el tercer trimestre del año se registró un superávit de la cuenta corriente, esta vez por 2 mil 13 millones de dólares, informó ayer el Banco de México (BdeM).
Lo anterior quiere decir que durante el periodo julio-septiembre de 2019 la tasa de ahorro interno fue acompañada por una disminución de la inversión, debido principalmente a las restricciones de gasto.
En su informe, el BdeM explicó que el superávit fue resultado de créditos por 137 mil 449 millones de dólares y débitos por 135 mil 436 millones.
Como proporción del producto interno bruto (PIB) se ubicó en 0.7 por ciento en el tercer trimestre de 2019, nivel que se compara con el déficit de 1.9 del PIB reportado en el mismo periodo de 2018.
Agregó que el saldo positivo de la cuenta corriente en el tercer trimestre de 2019 derivó de la combinación de un déficit en la balanza de bienes y servicios por 2 mil 482 millones de dólares y uno en la de ingreso primario por 4 mil 984 millones, así como de un superávit en la balanza de ingreso secundario por 9 mil 480 millones.
El ámbito internacional
El BdeM recordó que, en un contexto de elevada incertidumbre, los mercados financieros internacionales siguieron registrando recurrentes episodios de volatilidad, al tiempo que las perspectivas de crecimiento de la economía mundial para 2019 y 2020 han seguido revisándose a la baja y mantienen un balance de riesgo negativo, a pesar de la posibilidad de un acuerdo comercial preliminar entre Estados Unidos y China para reducir las tensiones entre ambas naciones y de los avances en la negociación de un pacto de salida entre Reino Unido y la Unión Europea.
Sin embargo, pese a este entorno, en el periodo julio-septiembre de 2019 la economía mexicana siguió captando recursos por inversión directa y cartera. La cuenta financiera de la balanza de pagos reportó en el tercer trimestre de 2019 un endeudamiento neto que implicó una entrada de recursos por 133 millones de dólares.
Este saldo se originó de endeudamientos netos por 3 mil 268 millones de dólares por inversión directa y de 2 mil 656 millones en el rubro de inversión de cartera; préstamos netos al resto del mundo, 431 millones, en el renglón de derivados financieros, y 9 mil 461 millones en el rubro de otra inversión. Además, de una disminución de los activos de reserva de 4 mil 102 millones.
En relación con la inversión extranjera directa neta (IEDN), este indicador registró 17.5 mil millones de dólares en enero-septiembre de 2019, contra 19.9 mil millones en el mismo lapso del año previo.
Es decir, mostró una contracción anual de 11.9 por ciento. Al analizar la información histórica (a partir de 2006) de la IEDN correspondiente a enero-septiembre se observa que dicha contracción es la menor de las cinco que han ocurrido desde 2006, señalaron analistas de BBVA.
Precisaron que en 2018 la IEDN mostró una variación anual negativa de 23.7 por ciento durante enero-septiembre.