No hay más indignación para Adriana Jiménez que no le reconozcan lo que se ha ganado en las plataformas de 20 metros en Campeonatos Mundiales y Copas del Mundo con cuatro medallas que la respaldan en los clavados de altura, disciplina que ya no aparece en el Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento (Fodepar), porque no es olímpico y no habrá apoyo económico, fue la versión que le dio hace dos semanas Israel Benítez, subdirector de calidad para el deporte en la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade).

La capitalina recibió la notificación de su baja y además se entera por un comunicado del organismo –el pasado miércoles– que su salida se debió por infringir el reglamento y obligaciones en la operación del Fodepar, como no informar por escrito contratos con patrocinadores celebrados con antelación y entregar una carta –el 26 de agosto– carente de sustento, sobre la preparación y resultados que ha tenido, sin cumplir con lo establecido.

Víctima de la corrupción

Ayer, la clavadista de 34 años de edad, acusó que hay intereses personales por afectarla y se considera víctima de la corrupción, como los casos que hay de varios deportistas por denunciar las irregularidades en la Conade que dirige Ana Guevara, por lo que se le hace injusto lo que está padeciendo, ya que nunca recibió la carta compromiso para firmarla y aún cuando lo solicitó, se la negaron, a ella y a su entrenador.

Lo que no se explica, señala Adriana, es que el retiro de su beca de 21 mil pesos mensuales que dejó de recibir en agosto, se da sin ningún documento avalado por el comité técnico del Fodepar y cada quien da su argumento. Lo que sí ha recibido es la prepotencia de los directivos de Conade, Marla Escobar y Arturo Contreras.

“Tenemos las pruebas necesarias, es una incongruencia total, y por eso hago un llamado al secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán, y a la secretaria de la Función Pública, Irma Sandoval, para que tomen cartas en el asunto y los atletas no seamos víctimas de los funcionarios públicos.

No sé cuál es mi delito, dijo la afectada para anunciar que presentó su denuncia ante la SFP con el número de folio 107639-2019 y acuse de recibido el 31 de octubre, en la conferencia de prensa que dio ayer acompañada de su entrenador César Oswaldo Cuevas Ballesteros, de su familia y sin el diputado Ernesto Vargas Contreras, que estaba invitado y no acudió por atender asuntos en San Lázaro, pero sigue atento de su caso como el de otros deportistas.

Estoy dispuesta a aclarar las reglas que he violado y que me digan qué hice. De ser así asumiré las consecuencias. Me dijeron que las nuevas indicaciones de operación hacían que los clavados de altura quedaran fuera del programa de apoyos, puntualizó la pionera de la disciplina en mujeres, al reconocer que esa brecha inició con Jonathan Paredes, tres veces medallista mundial, que también es becario del Fodepar.

Es triste y decepcionante la manera cómo se está llevando nuestro deporte en un año turbulento y no se está viendo el bienestar de los atletas ni tampoco se imaginaba que por haber levantado la voz recibiera represalias desde que subió un tuit para saber qué estaba pasando con las becas de la Conade, y aún cuando no ha tenido acercamiento con Guevara está dispuesta a reunirse con ella y aclarar el asunto que perjudica su carrera deportiva desde antes de que se fuera al Campeonato Mundial de Natación en Gwangju para ganar la medalla de plata.