Viernes 1º de noviembre de 2019, p. a13
La violencia en el futbol mexicano está en una etapa en la que aún se puede hacer un trabajo de prevención para evitar llegar a niveles de agresión como en Sudamérica o Inglaterra, aseguró el doctor en sociología del deporte Fernando Segura, quien es colaborador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) y trabaja con la organización no gubernamental argentina Salvemos al futbol.
Si bien los episodios de trifulcas entre aficionados en la Liga Mx han desatado controversia, los casos son esporádicos y aún están alejados de las cruentas escenas que se han suscitado en Argentina, por lo que Segura recomendó que debe existir un trabajo por parte de los clubes, autoridades y los propios medios de comunicación para evitar que se desarrollen más situaciones similares.
Los grupos de animación del futbol mexicano aún están en una etapa un poco más inocente que en Argentina, donde las barras tienen fuertes vínculos con sindicatos, partidos políticos y grupos delictivos
, dijo Segura al hacer una análisis después de la bronca que se desató hace una semana en el estadio del Atlético de San Luis.
Indicó que aunque los casos de violencia en México han crecido y afectan al clima del futbol, aún se puede atender (este fenómeno) porque todavía no está tan arraigado como en Argentina
.
No obstante, aceptó que existe el riesgo de que la violencia se desborde por lo que es necesario crear estrategias de prevención y no sólo imponer castigos a los agresores.
Más allá de la violencia física con los enfrentamientos, indicó que lo realmente alarmante es la ideología que esconde esa violencia entre los aficionados. “Lo que me asusta es que se impone una idea de la masculinidad dominante, que las barras tienen que demostrarle a la enemiga que son más machos, por decirlo de alguna forma. ¿Y qué implica eso? Que hay que pelearse, defender el honor y que no se pueda convivir en paz”.
Explicó que es importante no criminalizar a los aficionados sin antes hacer una investigación, al destacar que tantos los clubes como las autoridades son responsables de evitar que se desaten los enfrentamientos y en ocasiones los medios de comunicación magnifican los hechos.
“La crítica no la haría únicamente a las barras bravas, porque creo que hace falta un trabajo de prevención que debe venir de varias partes y uno de los principales obstáculos son los medios de comunicación, porque las barras ya tienen una mala imagen en México”.
La organización Salvemos al futbol, con la que colabora Segura, realizó una investigación sobre la violencia en el futbol y la manera en cómo se ha controlado en varios países como Argentina, Inglaterra y Brasil.
En el informe, se indica que “las barras son un actor violento en el mundo del futbol, pero no actúan de manera aislada” y para resolver este problema “es preciso desarticular las maneras en que los dirigentes, la política, los medios y el resto de los hinchas contribuyen a generar un clima de violencia. Mandar presos a los barrabravas o incrementar las penas no es suficiente”.