Trabajadores del volante agremiados a la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas (Amotac) y la Secretaría de Gobernación (SG) llegaron anoche a un primer acuerdo para establecer mesas de trabajo en materia de seguridad en las autopistas de la República y revisar la posibilidad de suspender los permisos a camiones de doble remolque que operan en el país, luego de un día de protestas en diversos puntos a lo largo del país.

Ricardo Peralta, subsecretario de Gobierno de la SG, afirmó, al concluir la primera reunión de trabajo, que está desactivada cualquier movilización en la que pueda haber un bloqueo. Se levanta la protesta a nivel nacional.

Miguel Ángel Santiago, coordinador de la Amotac, confirmó que los transportistas no realizarán más movilizaciones este día. Sin embargo, en caso de que no se atiendan las demandas, la siguiente semana están dispuestos a continuar con las protestas a escala nacional, dijo.

El subsecretario informó de la instalación de una mesa de gobernabilidad por el autotransporte federal, la cual estará integrada por funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), la Secretaría de la Función Pública, miembros de la Guardia Nacional, representantes de Caminos y Puentes Federales, legisladores, organizaciones de transportistas y académicos.

Se definirá una agenda nacional con base en la cual se solucionen problemas añejos, incluso algunos originados hace 10 años. El plan es hacer una mesa en la que se analicen problemas con soluciones factibles en términos legales, financieros y políticos, señaló.

El subsecretario Peralta reconoció que a pesar de la manifestación que se realizó en 23 entidades no se bloquearon carreteras ni los accesos a la Ciudad de México, aun cuando a gobernación llegaron 60 unidades. El pliego de peticiones de la asociación de transportistas será analizado a fondo, sin soluciones cosméticas, prometió Peralta.

Según el arreglo al que llegaron los transportistas y Gobernación, al cual tuvo acceso La Jornada y que fue firmado por representantes de la SCT, un integrante de la Cámara de Diputados y miembros de la Amotac “se llega al acuerdo derevisar la posibilidad de que se suspenda el emplacamiento de los convertidores o dollys –camiones de doble remolque–, así como los permisos para los vehículos doblemente articulados sin la revisión física y los permisos de conectividad”.

Rafael Ortiz Pacheco, presidente de la Amotac, afirmó en entrevista a La Jornada que en lo que va del año se han robado más de 70 camiones o vehículos de los agremiados y han sido asesinados más de 50 choferes en las autopistas del país, de ahí la demanda por mayor seguridad en los caminos.

Protestas en 14 estados

Miles de agremiados de la Amotac se manifestaron ayer en al menos 14 estados; con camiones de carga y vehículos pesados, se movilizaron en autopistas y carreteras.

En Veracruz, alrededor de 5 mil transportistas se sumaron al paro nacional y cerraron de manera parcial el bulevar Xalapa-Banderilla, lo que generó tránsito lento en la zona.

Los integrantes de la Amotac de San Cristóbal de las Casas, Chiapas; Tepic, Nayarit; Aguascalientes capital y Chapala, Jalisco, se unieron a la movilización en solidaridad con el gremio.

Las protestas iniciaron entre las 7 y 8 de la mañana y en la mayoría de los casos bloqueron uno o dos carriles de carreteras importantes con tractocamiones. En San Luis Potosí, se manifestaron más de 350 choferes.

En Michoacán, la principal exigencia de los transportistas fue el cese de las extorsiones de la policías federal, estatal y municipal. Bloquearon los accesos a Morelia, en la salida a Salamanca y Charo, así como las salidas a Pátzcuaro y Guadalajara.

En Chihuahua, 20 tractocamiones fueron colocados en la autopista Chihuahua-Ciudad Juárez, a la altura de la caseta de peaje Sacramento; sólo se permitió el paso de vehículos particulares.

En Acapulco, Guerrero, unos 40 autotransportes de carga y vehículos pesados se apostaron en el bulevar Vicente Guerrero, mientras decenas de miembros de la Amotac se ubicaron en la Autopista del Sol a la altura del Parador del Marqués, en Chilpancingo; sólo cerraron un carril de cada sentido.

En el estado de México, alrededor de 200 transportistas a bordo de camionetas y tractocamiones, avanzaron lentamente sobre la autopista México-Querétaro, ocuparon carriles laterales y centrales cruzando por los municipios de Cuautitlán Izcalli, Tlalnepantla y Naucalpan; también hubo movilización en Acolman.