La demora de 10 años del Instituto de Vivienda (Invi) para la entrega del dinero que cubriría el pago del terreno en Oriente 107, colonia Bondojito permitió a la inmobiliaria Jomar y Roju venderlo para la construcción de 180 viviendas, dijo el líder del Movimiento Alternativa Social (MAS), Édgar Torres, y aseguró que fue una operación ilegal.

Demandaron, pero no ganaron y la inmobiliaria fue absuelta, como lo exhibe la página del Consejo de la Judicatura Federal en su última instancia; no obstante, Torres manifestó que seguirá con los procesos legales porque a nosotros el Invi nos escondió el dinero durante la gestión de Raymundo Collins.

Aseguró que la inmobiliaria incumplió los acuerdos fiscales convenidos en 2007 por la compra del terreno de 2 mil 882 metros cuadrados. Dijo que se le entregó un millón de pesos con recursos de sus agremiados para pagar adeudos por impuesto de predial y agua, pero que no se cubrieron; este reclamo tampoco procedió.

Agregó que hubo una red de complicidades que involucra a funcionarios del Invi vinculados con el cártel inmobiliario que impidió concretar la compra con recursos que nosotros conseguimos del presupuesto.