Miércoles 16 de octubre de 2019, p. 5
Colectivos que fomentan la despenalización de la mariguana lamentaron que el Senado no los incluyó en los foros donde se analiza la regulación de la yerba.
Alfonso Jesús García Pérez, coordinador de la Federación de Organizaciones Civiles Mariguana Liberación, indicó que durante las semanas recientes juntaron más de 3 mil firmas para exigir a legisladores un parlamento abierto en el cual participaran organizaciones en favor del uso medicinal de la cannabis.
“Este martes, Julio Menchaca Salazar, presidente de la Comisión de Justicia, nos dijo que no habrá diálogo ni aceptarán nuestras propuestas, porque ‘el dictamen sobre la regulación está encima’, y al parecer lo presentan la próxima semana”.
Señaló que el colectivo había convocado a una sexta movilización al Senado el pasado 10 de octubre, pero la presidenta de la mesa directiva, la senadora Mónica Fernández Balboa, solicitó posponerla a cambio de gestionarles una reunión con Menchaca Salazar, a las 12 horas en el salón de protocolo del recinto.
Por parte de los consumidores asistieron Yésica Aglae Velázquez Sánchez, Alfonso Jesús García Pérez, María de Consuelo Monroy Dávila y Hugo Miguel Gallardo; sin embargo, el senador rechazó sus peticiones. Les respondió que después de aprobado el dictamen, veremos
. Ante la negativa, realizarán una nueva marcha al Senado el próximo jueves a las 15 horas.
Uso cultural
Sostuvieron que los usos culturales de la cannabis que promueve Mariguana Liberación son diferentes a los lúdicos. Estos son la mejor opción para insertar a los consumidores de la yerba en procesos de capacitación y de cultura, y para que la comunidad consumidora aporte a la sociedad mexicana con un uso creativo. Son también la fórmula eficaz para erradicar el consumo de drogas en menores de edad; brindar protocolos especiales a los jóvenes entre 18 y 22 años, y para desarrollar una investigación de punta sobre el sistema endocannabinoide
.
Otros importantes elementos que aporta Mariguana Liberación, dijeron, es ajustarse al marco legal internacional sobre estupefacientes y sicotrópícos, como lo establecen los artículos 235 fracción segunda y 247 fracción segunda de la Ley General de Salud. Además, plantean la producción campesina de la cannabis en sociedad con el gobierno.
También, los usos ecológicos, utilizando la biofibra del cáñamo junto con reciclamientos para fabricar papel y aglomerados que sustituyan el uso de la madera y salvar así a los bosques y selvas que son las zonas de filtración del agua de la lluvia, así como usos médicos homeopáticos en un protocolo general.