Para fortalecer el mercado interno y abatir la pobreza, objetivos de la política industrial anunciada por la Secretaría de Economía (SE) el jueves pasado, el gobierno federal debe enfocarse en hacer eficientes los sectores energético, financiero, del transporte y telecomunicaciones, ya que las demás industrias necesitan de ellos para operar, aseveró Alejandra Palacios, presidenta de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece).

También consideró que deben profundizase las reformas que se han llevado a cabo en las industrias energética, financiera y de telecomunicaciones, así como prestar atención al sector transporte, en particular puertos y ferrocarriles, porque es precursor del resto de las industrias y servirá para fortalecer a México como plataforma exportadora.

La funcionaria dijo a La Jornada que es sumamente positivo que el decálogo de la política industrial presentado al sector empresarial lleve por delante el principio competencia ya que es una poderosa herramienta para alcanzar los objetivos planteados.

La Secretaría de Economía tendrá que entregar ahora programas sectoriales y la Cofece, dijo, está lista para aportar sus conocimientos a fin de que queden plasmadas las acciones que se necesitan llevar a cabo para generar mas competencia en sectores estratégicos para el desarrollo del país.

Interrogada sobre qué tanto peso puede tener la competencia en los diferentes sectores industriales para resolver la pobreza extrema en el país, la presidenta del organismo antimonopolios explicó que los privilegios y conductas anticompetitivas tienen como primer efecto la generación de sobreprecios en los bienes y servicios.

Si bien reconoció que la pobreza es un fenómeno multifactorial, señaló que una cara de la moneda es el ingreso disponible que se tiene para adquirir los bienes y servicios necesarios para subsistir, la otra es para cuánto alcanza con dicho ingreso.

Menores precios

Cuando hay competencia se genera presión entre los participantes de los distintos mercados de bienes y servicios, entonces se reducen precios, resultan más cercanos a sus costos, a las familias les alcanza para más y las empresas no cobran márgenes exorbitantes.

Además, se aceleran las inversiones porque las empresas deben innovar, mejorar productos, ser mejores para ganarse el favor del cliente y eso genera crecimiento económico, puntualizó.

Alejandra Palacios recordó que antes del proceso electoral de 2018 la Cofece presentó el documento Competencia económica, plataforma para el crecimiento 2018-2024, dirigido a todos los partidos y candidatos presidenciales.

Ahí, refirió, planteamos que el fortalecimiento de la economía, la erradicación de privilegios económicos que benefician sólo a unos cuantos en detrimento de la mayoría y una mejor distribución de los recursos encuentran en la competencia económica una poderosa herramienta para alcanzar estos objetivos.