Domingo 6 de octubre de 2019, p. a15
Mineapolis. Una segunda oportunidad se le presenta hoy a la mexicana Paola Longoria para conseguir el título 100 en su carrera al colocarse en la final del Abierto de Estados Unidos, cuando enfrente a María José Vargas en un duelo con sabor a revancha, luego de que la argentina la derrotara hace un par de semanas y le malograra la fiesta.
Longoria, número uno del mundo, venció ayer en semifinales a su compatriota Monserrat Mejía por parciales de 15-5 y 15-6 para llegar a su duodécima final seguida del US Open.
Con un dominio total desde el inicio, la favorita logró el primer punto del partido y luego tomó una cómoda ventaja 7-1, la cual amplió a 14-2, y aunque su rival intentó meterse al partido con tres puntos seguidos, fue imposible ante la monarca.
Las cosas no cambiaron mucho en el segundo parcial, en el que la actual campeona se adelantó 5-0 ante una rival que, por más que se esforzaba en la cancha, nada podía hacer ante su oponente.
Mejía logró cuatro puntos seguidos antes de igualar 6-6, pero la mejor del orbe apretó el acelerador, evitó cualquier sorpresa y con su primer punto para partido sentenció el juego.
Vargas, tercera de la siembra, derrotó en la otra semifinal a la mexicana Samantha Salas por 15-12, 7-15 y 11-1.
En la final de dobles, Longoria y Salas perdieron 13-15 y 12-15 ante Mejía y Alexandra Herrera, nuevas campeonas en el certamen de Minnesota.