Domingo 6 de octubre de 2019, p. a14
Veracruz parecía que cortaba la racha de 38 partidos sin victoria y sumó una más. Más de un año sin celebrar, pero León le devolvió a la realidad con el empate 1-1. Los escualos apenas llegaron a cuatro unidades y siguen en el fondo de la tabla, mientras los esmeraldas se mantienen en el cuarto lugar con 20 unidades.
Sin lograr nada vistoso y con sentido, Veracruz al menos mantuvo a salvo su portería. Pero todo se complicó. Una barrida salvaje de Gaspar Íñiguez con los tachones al tobillo de Sosa. El árbitro no alcanzó a ver la entrada así que acudió al VAR. Apenas tuvo que revisar la imagen para sacar sin titubeos la tarjeta roja.
Veracruz no sólo abona en su desgracia, sino que pareciera que una sombra oscura se cierne sobre ellos. Si hace una semana por fin rompían una racha de más de un año sin victorias, en el tiempo de compensación al final del encuentro, Toluca le hizo el gol con el que sellaron el empate.
Ayer también tuvo su episodio de mal fario, cuando más débiles se encontraban por la tarjeta roja contra Íñiguez, a punto de terminar el primero tiempo, un balón filtrado para Bryan Carrasco culminó en el fondo de la portería. El jugador del Veracruz celebraba eufórico, pero nadie le advertía que el asistente había decretado fuera del lugar.
Al volver a la segunda parte, de nuevo amenazó Veracruz, un golazo de Daniel Villalva, que recibió de espaldas al arco y recetó de media vuelta, pero esta vez el fuera de lugar era más claro.
Al minuto 80, un salto de Miguel Herrera para obstruir un remate, pero la pelota dio en su mano y decretaron penal en favor de Veracruz. Un lío para ponerse de acuerdo sobre quién lo cobraría, Carrasco lo hizo, despacio y esquinado para conseguir por fin el gol para los escualos al 83. Pero tres minutos más tarde, Luis Montes remató de cabeza para recordarle al Veracruz que lo suyo es el drama y sentenciar el 1-1.