Zacatecas, Zac., Ejidatarios y transportistas cumplieron ayer nueve días de bloqueo en la mina de oro y plata a cielo abierto Peñasquito, propiedad del corporativo trasnacional Newmont-Goldcorp, en demanda de que el consorcio repare integralmente los daños causados a las comunidades, en particular la desecación de mantos freáticos, un manantial y cinco pozos agrícolas.

El gobernador Alejandro Tello Cristerna acudió por segunda ocasión al valle de Mazapil para intentar convencer a ejidatarios y transportistas de que liberaran las instalaciones de Peñasquito, donde laboran alrededor de 6 mil 500 personas, pero no lo logró.

El comisario ejidal de San Juan de Cedros, Rigoberto López Martínez, en nombre de los inconformes, envió una carta al presidente Andrés Manuel López Obrador para exponer las razones del conflicto, que empezó en 2012, con el agotamiento de nuestro manantial.

Asimismo, pobladores de San Juan de Cedros pidieron que López Obrador asuma la defensa del medio ambiente en Mazapil y se les indemnice por los daños que, aseguran, ha provocado la mina.

“En materia de daño ambiental existe el principio de ‘el que contamina, paga’. Esto se traduce en la obligación de responder por un daño aunque no haya habido intención de causarlo.

Sin embargo, empresas como minera Peñasquito no cumplen con este principio, dejando las tierras que ocupan para la extracción de los minerales y las de los jales totalmente contaminadas, acusaron.

También denuncian el despojo de territorio, derechos y bienes naturales en Zacatecas por las mineras, que la mayoría de las veces subordinan a los gobiernos locales y nacionales.

El comisario ejidal de Cedros solicitó una audiencia con el Presidente para encontrar una solución definitiva a este problema que pueda conllevar la anulación de la concesión minera otorgada a minera Peñasquito, y a revisar y en su caso anular la concesión de agua de alrededor de 49 millones de metros cúbicos, otorgada a esta empresa trasnacional.