En una economía mundial en la que los gustos de los consumidores van cambiando y se inclinan por modelos amigables con el medio ambiente, la competencia entre empresas se dará en el plano de la sustentabilidad, por lo que aquella que no lo sea difícilmente podrá brillar en el mercado, advirtió Gustavo Castro, director general del Grupo Asociación de Comerciantes Especializados (ACE).

No obstante, dijo en entrevista con La Jornada, en el camino hacia su transformación sustentable las compañías, especialmente las que se dedican al comercio minorista, deben tener cuidado de no traspasar los costos a los consumidores, dado que eso sería contraproducente para el negocio.

Existe la suposición de que los costos, por ejemplo de eliminar el plástico y sustituir los empaques por otro material, quedarán en manos del público, pero no pude ser así. Aún no hay una inversión concreta, pero la tendremos. Ya después veremos cómo ser sustentables financieramente, explicó el directivo de la asociación, que aglutina a 33 firmas de consumo.

Para Gustavo Castro, las empresas deben ser proactivas y anticiparse a los cambios, dado que las nuevas generaciones se inclinan por las compañías que son amigables con el medio ambiente, lo cual significa que en el futuro la forma de castigar por la población no será por medio de votos a los políticos, sino dejando de consumir en ciertas empresas.

Danilo Errico, gerente de exportación de la empresa de bioplásticos biodegradables Novamont, señaló que cualquier empresa, sin importar su tamaño, puede ser sustentable. Basta con que implemente productos compostables en lugar de plásticos y reduzca su generación de basura y uso de energía.

Existen muchas cosas que pueden hacer para convertirse en empresas amigables con el medio ambiente, expresó el directivo italiano en una visita a México para compartir su experiencia con las empresas que forman parte de Grupo ACE.

Para el experto, México puede ser punta de lanza en América Latina en cuestiones de sustentabilidad; no obstante, debe tomar de ejemplo lo que se está haciendo en países de otras latitudes; por ejemplo, dijo, Suiza y Noruega eliminaron todos los empaques de plástico; Francia, España e Italia usan compostaje para fabricar plástico, y lo mismo sucede en Sudáfrica, cuyas compañías lo implementaron sin que una ley las obligara.

Camino mexicano

Por ley, a partir del año próximo en la Ciudad de México todas las empresas tendrán prohibido dar a los clientes productos de un solo uso, como por ejemplo bolsas de plástico, popotes y cubiertos desechables, por lo cual ya deben tener una estrategia para saber qué van a hacer.

Al respecto, Gisela Galicia, experta en legislación sobre plástico de un solo uso, señaló que dicha disposición es algo positivo para el país; sin embargo, añadió, hacen falta un par de puntos fundamentales, que son mayor información y educación de la población.

Para que esa ley funcione se debe complementar con un programa de educación sobre el tema. Esto ayudará, por ejemplo, a que una industria clave, como es la del plástico, puede reciclar y dar un giro hacia la composta sin mayores inconvenientes y con menores recursos, expresó.

En ese sentido, el director de Grupo ACE aseguró que sus empresas asociadas le dan la bienvenida a la ley; sin embargo, no la necesitan, porque están conscientes de que deben hacer más, a grado tal que quieren demostrar que las pequeñas y medianas tiendas de consumo también pueden ser sustentables.