La venta de la casa incautada en marzo de 2006 al empresario mexicano de origen chino Zhenli Ye Gon, y los amparos promovidos para recuperarla, trajo como consecuencia que los archivos de la Fiscalía de General de la República (FGR) se reabrieran para conocer el destino de los 205 millones de dólares que se localizaron en la residencia, y algunos funcionarios que participaron en esa acción afirman que en el operativo colaboró personal de la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) y del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), en colaboración con autoridades mexicanas.

El caso que inició con una investigación por tráfico de seudoefedrina, puso al descubierto que Ye Gon se convirtió en un vendedor de precursores químicos para los grupos criminales dedicados a la producción de drogas sintéticas.

Los funcionarios consultados señalaron que la tarde del 15 de marzo de 2006 un grupo de agentes mexicanos fue comisionado para realizar el cateo al inmueble ubicado en el número 515 de la calle Sierra Madre, de la colonia Lomas de Chapultepec en la Ciudad de México, iban únicamente en busca de documentación que pudiera acreditar que Ye Gon, quien era considerado un abastecedor de productos químicos para la industria farmacéutica, estaba involucrado en actividades ilícitas.

Según la información proporcionada, Ye Gon –además de haber trasladado un cargamento de 15 toneladas de seudoefedrina a México, el cual fue decomisado en el puerto de Lázaro Cárdenas–, ya tenía contratos con empresas extranjeras para la importación de 50 toneladas más.

Durante el cateo, indicaron las fuentes, uno de los funcionarios se percató que el grosor de una de las paredes no correspondía con el resto de la construcción, y con un bastón comenzó a golpear el muro falso, y una parte de tablaroca cedió dejando al descubierto maletas con dinero.

Las autoridades mexicanas que ya trabajaban el caso con las agencias estadunidenses inmediatamente enviaron un grupo especial en el que iban –vestidos como agentes mexicanos– personal de la DEA y el ICE.

El inmueble se cercó, y en la sede de la entonces Procuraduría Genbera del República hacían llamados urgentes a los agentes a informar cuánto habían encontrado. Los entrevistados señalaron que el encargado sólo respondía: un chingo, un chingo, por eso se determinó que las maletas fueran trasladadas a la entonces Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (Siedo), y los funcionarios estadunidenses participaron como observadores.

Finalmente se determinó que fueron 205 millones de dólares en efectivo, una cantidad que mereció, dijeron los entrevistados, que el ICE otorgara un reconocimiento a las autoridades mexicanas.

El tema de la casa y los recursos incautados fue retomado en julio pasado cuando se anunció la venta de la mansión para otorgar premios a los medallistas de los recientes Juegos Panamericanos.

La defensa de Ye Gon promovió dos amparos contra la incautación del inmueble, el cual fue subastado por el gobierno federal y por el cual obtuvo ingresos por 102 millones de pesos. Las peticiones de amparo fueron rechazadas, luego de que se comprobó que el empresario de origen chino en 2006 no presentó ningún recurso contra la declaratoria de abandono.

Funcionarios de la FGR señalaron que los 205 millones de dólares y 17 millones de pesos decomisados en la casa de las Lomas de Chapultepec también fueron declarados en abandono, porque los abogados de Ye Gon tampoco interpusieron ningún recurso para reclamar ese dinero.