Viernes 6 de septiembre de 2019, p. 26
Roma. El presidente de Italia, Sergio Mattarella, tomó juramento ayer al nuevo gobierno proeuropeo de la tercera mayor economía de Europa, un Ejecutivo que deja fuera a la extrema derecha.
El premier Giuseppe Conte y sus ministros del partido antisistema Movimiento 5 Estrellas (M5S) y del Partido Demócrata (PD) rindieron protesta en el palacio presidencial.
Estamos preparados para darlo todo por el país
, sostuvo el líder del M5S, Luigi di Maio, quien será el nuevo canciller.
La nueva coalición todavía necesita la aprobación del Parlamento en un voto previsto para el lunes en la cámara baja y el martes en el Senado.
Buena suerte al nuevo gobierno y a sus ministros
, deseó Nicola Zingaretti, líder del PD.
La primera y principal tarea del nuevo gobierno será el presupuesto para 2020, que debe ser presentado al Parlamento antes de que termine septiembre, y luego a la Unión Europea (UE), el 15 de octubre.
La elección de Roberto Gualtieri, del PD, como ministro de Finanzas, es en extremo positiva, especialmente para las relaciones con la UE
, indicó Lorenzo Codogno, ex jefe economista del departamento italiano del Tesoro.
La coalición hasta ahora en el poder, formada por el M5S y La Liga, el partido de extrema derecha antinmigración, de Matteo Salvini, vivió un duro enfrentamiento con la Unión Europea por su presupuesto demasiado expansivo, a los ojos de Bruselas.
El nuevo gabinete es el más joven de la historia de Italia desde la posguerra, con una media de edad de 47 años, y tiene más ministros del sur del país, más pobre que el norte.
De los 21 ministros, nueve son del Partido Demócrata; 10 del antisistema M5S, uno del pequeño partido de izquierda Libres e Iguales y otro que no tiene afiliación política, la nueva ministra del Interior, Luciana Lamorgese, quien fue la máxima responsable de la seguridad en Milán y sustituirá a Salvini, el hombre fuerte del anterior gobierno que al retirar el apoyo de su partido provocó la caída del Ejecutivo.
Salvini, conocido por su actividad constante en las redes sociales, esperaba provocar elecciones y aprovechar así su popularidad, pero el resultado no fue el esperado.
Predijo ayer que el nuevo gobierno no durará mucho. Haremos oposición en el Parlamento, en los ayuntamientos, en las plazas y al final votaremos y ganaremos
.
Según la prensa, Salvini habría rechazado estar presente durante el traspaso de poder con Lamorgese.
La principal tarea de este último será abordar la espinosa cuestión de la inmigración, que divide a Italia.