Las ventas foráneas de Exportadora de Sal (Essa) cayeron 16.97 por ciento durante los primeros 8 meses del actual gobierno. La salinera más grande del mundo, ubicada en Guerrero Negro, Baja California Sur, tiene 51 por ciento de participación estatal mediante el fideicomiso del Fondo Minero, que depende de la Secretaría de Economía, mientras el restante 49 por ciento es de la compañía japonesa Mitsubishi. En México las ventas se desplomaron 37.56 por ciento.