Jueves 5 de septiembre de 2019, p. 21
Un débil crecimiento económico a mediano plazo, sumado a presiones de carácter fiscal ocasionadas por Petróleos Mexicanos (Pemex), son los riesgos para una eventual baja a la calificación soberana del país, advirtió Moody’s Investors Services.
Actualmente, la calificación de la deuda emitida por el Estado mexicano es A3, dentro del grado de inversión.
Ariane Ortiz Bollin, vicepresidenta asistente de la agencia calificadora de valores, señaló que la percepción de riesgo para el país está al alza debido a la tendencia a la baja en la inversión, mayores salidas de capital y caída en la confianza del consumidor.
En la parte fiscal existe una tendencia a la baja en los ingresos, a raíz, principalmente, de una menor producción petrolera, además de que hay una contracción del gasto, lo que provocará que el gobierno tenga menor espacio fiscal durante el próximo año, agregó, al participar en el Foro Anual de Moody’s.
Para este año, el gobierno federal tiene la meta de un superávit fiscal –ingreso menos gasto antes del pago de intereses– de uno por ciento del producto interno bruto. Y para 2020 se espera que sea mayor, aunque la cifra será conocida el próximo domingo, cuando sea presentado el paquete económico.
Desde el punto de vista de la calificadora, Pemex necesitará de apoyo para cumplir con sus obligaciones, al grado de requerir mayor inversión de la presupuestada por el gobierno para exploración y producción.
Lo anterior, dijo Ortiz Bollin, se traducirá en que el gobierno haga transferencias de recursos a la petrolera al menos durante los dos o tres siguientes años, lo que la convertirá en el principal riesgo fiscal para el país.
Pemex necesita más
Peter Speer, analista responsable para Pemex de la calificadora, consideró que en 2020 la petrolera necesitará poco más de 7 mil millones de dólares para poder realizar sus planes; sin embargo, entre inversiones en producción y exploración, amortizaciones de deuda y otros proyectos, la cifra puede ascender a 20 mil millones de dólares.
No obstante, dijo, los apoyos económicos que ha dado el gobierno a la empresa productiva del Estado y las futuras medidas que la administración haga con respecto al tema, son un riesgo crítico
para la nota crediticia del país y por tanto, la de la petrolera, que aún cuenta con grado de inversión.
Sin embargo, sostuvo, los actuales niveles de inversión son insuficientes
si se tiene la meta de aumentar la producción petrolera y las reservas de Pemex, por lo que se requiere una mayor cantidad de recursos para que estos índices vayan al alza.
Peter Speer añadió que la petrolera requiere mayor inversión a fin de reactivar la producción, y en caso que se reconsidere la reapertura de los contratos entre privados y la empresa productiva del Estado sería muy positivo
para la firma y los inversionistas.