Chicago. La temporada 100 de la NFL comenzará este jueves y será con la rivalidad más añeja: Osos de Chicago contra Empacadores de Green Bay, para dejar a los vigentes campeones Patriotas de Nueva Inglaterra en el duelo estelar del domingo.

Los Osos se perfilan como favoritos a este encuentro al llegar con el título de la División Norte de la Conferencia Nacional, hazaña que no habían conseguido desde 2010. El éxito de Chicago se debe en gran parte a su defensiva, aunque ahora deberán lidiar con la salida de Vic Fangio, quien dejó su puesto como coordinador ofensivo para firmar con los Broncos de Denver.

En la ofensiva, se respaldarán en el mariscal de campo Mitchell Trubisky, quien llegó hace un año de la mano del entrenador Matt Nagy. Él ha crecido mentalmente, realmente lo ha hecho, dijo el coach. Eso es lo que buscamos y ahora tenemos que hacerlo en el terreno.

Green Bay tiene ligera ventaja en los partidos entre sí de 97 victorias, 95 derrotas y seis empates sobre Chicago, en tanto que en postemporada existe un triunfo por equipo. Apenas el año pasado también jugaron en la primera fecha, pero no en el juego inaugural de campaña, con resultado de 24 a 23 en favor de los Empacadores.

Ambos conjuntos estrenarán coordinadores, Chuk Pagano llegó para la defensiva de Osos y Matt LaFleur para mejorar la ofensiva de Green Bay, con el aviso de que el mariscal de campo Aaron Rodgers podrá hacer cualquier tipo de ajuste antes de las jugadas para beneficio de los Empacadores.

Siempre es el gran Chicago contra el pequeño Green Bay, dijo Rodgers de cara al duelo que se disputará en el Soldier Field. Hemos hecho lo nuestro a lo largo de los años y siempre ha sido una gran rivalidad. Es una de las historias especiales del deporte profesional, agregó.

Elliott acuerda con Dallas

Rodgers ha sido un dolor de cabeza para los Osos, a quienes ha vencido en 16 de 21 partidos. El año pasado, se sacudió un déficit de 20 puntos en la segunda mitad y una lesión en una rodilla para guiar a los Empacadores a una victoria de 24-23 sobre Khalil Mack y los Bears.

En tanto, los Vaqueros de Dallas y el corredor Ezekiel Elliott llegaron a un acuerdo para una extensión de contrato de 90 millones de dólares por seis años que le harán el jugador de su posición mejor pagado en la NFL y que pone fin a un impasse que vio a el jugador ausentarse de toda la pretemporada.

Elliott recibirá 50 millones garantizados. El promedio de 15 millones por año en la extensión supera los 14.4 millones del contrato de Todd Gurley con los Carneros de Los Ángeles el año pasado. El dinero garantizado para Gurley es de 45 millones.