Una manifestación estudiantil celebrada ayer en Ciudad Universitaria (CU) en conmemoración del primer aniversario del ataque de un grupo de choque a alumnos del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Azcapotzalco derivó ayer en tensión y agresiones cuando encapuchados lanzaron petardos y piedras contra instalaciones y personal de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Alrededor de un centenar de jóvenes marcharon a las dos de la tarde del parque de la Bombilla a CU para demandar seguridad y repudiar los hechos del 3 de septiembre de 2018, cuando estudiantes de bachillerato que se manifestaban de forma pacífica fueron agredidos a golpes, con palos, piedras e incluso navajas y bombas molotov por un grupo porril, lo que dejó varios heridos.

A las 15 horas, los encapuchados se desprendieron del contingente y lanzaron piedras y petardos contra un módulo de vigilancia cercano a la Torre de Rectoría y después contra esta última, donde realizaron pintas, detonaron explosivos y rompieron vidrios y mobiliario, aunque no consiguieron entrar al edificio. Algunos estudiantes y personal universitario observaron y tomaron fotos y video de lo sucedido en el campus, donde no se interrumpieron las clases.

Cerca de las cuatro, los encapuchados se dirigieron a las islas. Hicieron pintas en las letras de más de un metro de alto que dicen #HechoEnCU y arrojaron otros de estos objetos a los espejos de agua de la zona. Ahí, algunos se cambiaron de ropa y se dispersaron.

La UNAM levantó actas

La UNAM consideró que estos hechos obedecen a una burda provocación montada en contra de la Universidad Nacional y al mismo tiempo pretenden desvirtuar el legítimo derecho de la manifestación pacífica.

En un comunicado, sostuvo que la institución condena la violencia ejercida por estos grupos vandálicos que buscan generar la falsa idea de un inexistente ambiente de desestabilización, lo que no corresponde a la realidad de esta casa de estudios. No reportó heridos e informó que ha levantado actas contra quienes resulten responsables de los hechos.

En otro documento, la UNAM manifestó que el año pasado fincó procedimiento disciplinario contra más de 40 personas que participaron en el ataque de 2018, quienes fueron sancionadas con expulsión, en tanto que –en colaboración con las autoridades capitalinas– se procesó penalmente a más de 30 responsables. Además, dijo, ha tomado medidas para incrementar la seguridad de la comunidad universitaria. Provocaciones como la del año pasado, concebida por alguna mente criminal y ejecutada por vándalos, son inadmisibles en nuestro país y más aún en una institución educativa, señalaron las autoridades universitarias.

En tanto, alumnos del CCH Azcapotzalco mantuvieron ayer un paro de labores en demanda de seguridad y en memoria del ataque de hace un año. Alumnos consultados indicaron que demandan la desarticulación de los grupos porriles y el cese del acoso.