La conmemoración del 85 aniversario del Fondo de Cultura Económica (FCE) se convirtió en el escaparate para que el presidente Andrés Manuel López Obrador destacara que uno de los distintivos de la Cuarta Transformación es acercar la lectura a la gente, a la vez que subrayó la importancia de que los intelectuales se comprometan con los procesos de transformación.

De su lado, el director del FCE, Paco Ignacio Taibo II, rindió un informe de labores de su gestión, en el que destacó el giro que se ha dado a la editorial.

En una sencilla ceremonia realizada en las instalaciones de la editorial, al sur de la Ciudad de México, el mandatario manifestó su satisfacción por el hecho de que el escritor haya tomado las riendas del fondo.

Me costó trabajo. Celebro que Paco haya aceptado este encargo (...) Ahora se está haciendo la labor de imprimir libros con costos accesibles de 10, 15, 20 pesos, para que pueda leer todo el pueblo. Es una labor extraordinaria, esto es un distintivo de la Cuarta Transformación.

Destacó que Taibo II se haya sumado a la administración pública dejando de lado –por el momento– su labor como escritor. Es mucho placer trabajar en lo intelectual, pero también se necesita que los intelectuales ayuden en los procesos de transformación. A lo mejor que escriban y no participen cuando hay inmovilismo, cuando impera el conservadurismo, pero en un proceso de cambio es indispensable que lo hagan. A veces cuesta mucho trabajo que actúen quienes se dedican a las letras o a las artes; no quieren comprometerse.

El Presidente destacó la importancia de la labor del historiador Daniel Cosío Villegas, fundador del FCE y El Colegio de México. De su obra resaltó los 10 tomos de La historia moderna de México para conocer la memoria política del país.

Dos periodos de estudio de Cosío Villegas son el porfiriato y la Revolución, de la cual, subrayó, no pudo arrancar el régimen porfirista. Don Daniel decía que ya no estaba don Porfirio, pero se había quedado doña Porfiria. La Revolución no pudo establecer un sistema verdaderamente democrático.

El régimen neoliberal o neoporfirista trató de arrebatar la historia del país. Por ello, afirmó que en un espacio que el extinto Estado Mayor Presidencial tenía en Palacio Nacional, se instalará una exhibición con los retratos de los héroes olvidados que fueron importantísimos en las transformaciones, como los generales Francisco J. Múgica y Heriberto Jara, o el ex gobernador de Yucatán Felipe Carrillo Puerto. Esta sala llevará el nombre de uno de los mejores periodistas del país: Daniel Cabrera, quien fue director de El Hijo del Ahuizote.

En su discurso, Taibo destacó: Nuevos vientos libertarios soplan sobre México. Quien lo desconozca no se enteró de los vientos de cambio, júbilo, esperanza. La revolución electoral cambió al país, movilizó esperanzas, ilusiones, renovación económica y batalla contra la corrupción.

Añadió que sostener la mejor de las tradiciones de Daniel Cosío Villegas y Arnaldo Orfila revitaliza el catalogo constituido en estos 85 años, pero teníamos que cambiar el Fondo, pues brillaban las incongruencias, el autoritarismo, el dispendio, la arrogancia, el gasto innecesario, la mentalidad faraónica.

Hoy el objetivo, dijo, es crear una editorial al ritmo de los tiempos, esencialmente popular, gústele a quien le guste. Destacó que ahora se llega a “comunidades agraviadas, como Nochixtlán, donde fuimos a decir: ‘traemos libros donde antes el gobierno traía balas’; a los hijos de los jornaleros de San Quintín” o la llegada del Librobús a zonas marginadas y la donación de bibliotecas.