Para Xyomara Valdivia, medallista de plata en fisicoculturismo, deporte que por primer vez apareció en Juegos Panamericanos, en Lima 2019, es una presea de oro blanco la que llegó circunstancialmente, pues si bien ganar por el país en una competencia de ciclo olímpico es el sueño de todo atleta, estaba algo alejada de esa posibilidad a sus 43 años y en una modalidad que se compite poco en el mundo.

Me hubiera encantado que hubiera sido de oro, pero aun así es mi máximo trofeo; el mayor premio en mi carrera deportiva; es el mejor logro que he tenido, a pesar de que en la mayoría de mis competencias en mundiales siempre me ha ido muy bien. Siempre primeros lugares, pero esta competencia es la que más me ha marcado, porque es la primera de ciclo olímpico, asentó la atleta regiomontana.

Xyomara es prácticamente la única exponente mexicana en el fitness coreográfico, modalidad en la que la empezó a competir hace 20 años. Comenta que en la actualidad, México tiene muy alto nivel de infantiles, varias campeonas mundiales y una participación muy nutrida en los nacionales, pero las mayores se han retirado, así que me atrevo a decir que soy la única de categoría mayor, dijo, y explicó se ha mantenido vigente sólo en campeonatos mundiales que programan la especialidad.

Llegó a Lima como favorita de la prueba en la que se califica, además del cuerpo musculoso y delineado, flexibilidad, coordinación, gracia y potencia. Antes de los Juegos, había ganado el primer Campeonato Panamericano, en Guatemala, que fue calificatorio para los Panamericanos.

Sin embargo, un desgarre en el tobillo derecho frenó su desempeño en la competencia, en la que avanzó con la mayor puntuación en las dos primeras fases, y en la definitiva entre las 16 participantes, se quedó con la medalla plata, detrás de la salvadoreña Paulina Zamora y delante de la chilena Macarena Figueroa.

De cualquier forma, considera que fue un logro inesperado, pues nunca pensó que el fitness fuera a convertirse en prueba de ciclo olímpico. Ya muy atrás había dejado ese sueño, al tomar esta disciplina tras practicar gimnasia olímpica 14 años entre la niñez y adolescencia.

Ahora espera participar en uno o dos mundiales más, aunque no descarta la posibilidad de continuar más años, si el fitness llega como exhibición olímpica a París 2024, aunque sea la abuelita campeona.