El Paso, En menos de 24 horas Estados Unidos vivió uno de sus peores fines de semana por la violencia con armas de fuego, después de que tres ataques, en tres ciudades, provocaron casi 30 muertos, entre ellos siete mexicanos, y al menos 60 heridos.

Autoridades identificaron ayer a Connor Betts, de 24 años, de raza blanca, como el autor del ataque con arma de fuego que dejó nueve muertos, incluida su hermana, y unos 27 heridos en un bar del distrito de Oregon, en Dayton, Ohio. Esta zona, un tranquilo barrio histórico, es popular por sus clubes nocturnos, restaurantes, galerías de arte y tiendas.

Nan Whaley, alcalde de Dayton, reportó en rueda de prensa que Betts se equipó con una máscara, un chaleco antibalas, un fusil calibre .223 y cargadores de alta capacidad para irrumpir en el lugar alrededor de la una de la madrugada (hora local), y disparar sin pausa.

Matt Carper, subjefe de la policía, detalló que varios agentes llegaron al bar en menos de un minuto y mataron a tiros al atacante, lo que probablemente evitó un número mayor de víctimas.

El mando policial indicó que se abrió una investigación para determinar los motivos de la agresión, pero se negó a especular sobre el móvil. La Oficina de Investigación Federal (FBI), cree que el individuo actuó solo.

Carper detalló que Megan Betts, de 22 años y hermana del agresor fue encontrada muerta en un auto junto a su novio, informaron medios estadunidenses.

Las otras víctimas son tres mujeres y cuatro hombres.

Por otro lado, en Douglas Park, Chicago, un hombre a bordo de un Chevrolet Camaro negro disparó a eso de la 1:20 de la madrugada (hora local), contra un grupo de personas, dejando heridas a tres mujeres y cuatro hombres de entre 19 a 25 años, informaron medios locales.

Una hora después se escucharon nuevas detonaciones en la cercana calle de South Troy, donde quedaron dos mujeres lesionadas. Todos los heridos fueron trasladados a los hospitales Mount Sinai y Stroger.

Los nuevos tiroteos ocurrieron apenas 13 horas después de que un hombre armado, identificado como Patrick Wood Crusius, de 21 años, disparó en un Walmart de El Paso, Texas, el pasado sábado, dejando al menos 20 muertos, entre ellos siete mexicanos, y 26 heridos.

Crusius, preso en una cárcel de El Paso, enfrenta cargos de homicidio en primer grado, delito que conlleva la pena capital, informó en conferencia de prensa el vocero de la policía local, Robert Gomez.

Greg Allen, jefe de la policía de El Paso, explicó que las autoridades indagan la existencia de un manifiesto, posiblemente del agresor, que indica que hay un nexo potencial con un crimen de odio.

El texto, de cuatro cuartillas y publicado en el portal 8chan, llama al ataque una respuesta a la invasión hispana de Texas y evoca al tiroteo hecho por un supremacista blanco en mezquitas en Christchurch, Nueva Zelanda, el 15 de marzo, que provocó 51 muertos.

John Bash, fiscal del Distrito oeste de Texas, quien trabaja bajo la dirección del fiscal general de Estados Unidos, Bill Barr, detalló que se presentaron cargos por crímenes de odio y cargos federales por armas, lo que será sentenciado con la pena de muerte

Estamos tratándolo como caso de terrorismo doméstico y haremos lo que hacemos con los terroristas en este país; habrá justicia rápida y segura, sostuvo Bash.

Los vecinos en El Paso pusieron en el lugar del ataque fotos de algunos de los fallecidos, veladoras, flores, mensajes de ánimo y oraciones religiosas, mientras los hospitales aún recibían donaciones de sangre para los heridos. Ayer se reportaron marchas contra la violencia provocada por las armas en Nueva York y el sábado en Washington. En Dayton, Ohio, se organizaron vigilias en la escena del tiroteo en medio de un creciente temor ante amenazas de terrorismo blanco.

Estas balaceras ocurren después de que la semana pasada un joven de 19 años mató a tres personas e hirió a 13 en un tiroteo en el popular Festival del Ajo de Gilroy, California, para luego suicidarse.

En tanto, el Walmart ubicado en Gibsonton Drive, condado de Hillsborough, Florida, fue desalojado tras una alerta de tiroteo que resultó falsa. El supuesto atacante, Wayne Lie Padgett, fue arrestado por uso de arma de fuego falsa, informaron autoridades.