La devoción patológica de una pareja por su hijo es el tema central de La cría, obra que explora ‘‘las dinámicas de un amor excesivo que puede destruir”, sostuvo Carlos Talancón, director y autor de la pieza que desarrolla nueva temporada ahora en el sótano del Teatro del Bosque Julio Castillo.

La criatura, a quien los protagonistas describen monstruosa aunque no parecen darse cuenta, es el nodo alrededor del cual los padres establecen una rutina de enclaustramiento y obsesión por mantenerla a salvo, a pesar de la insania mental y emocional que les causa.

El montaje, protagonizado por Milleth Gómez y Anelvi Rivera (alternan funciones), Emmanuel Morales y Javier Sánchez, propicia con la fábula y el recurso de la cercanía en un espacio no convencional y pequeño, que los espectadores se sumerjan en la dramaturgia ‘‘como si fuera un cuento de niños, con esa especie de frescura e ingenuidad”, adelantó Talancón. El escenario es el techo bajo, las paredes cercanas alrededor de pocas sillas, la semioscuridad, los sonidos reverberantes en un cubículo recubierto de malla de alambre, luces amarillentas y muebles desvencijados se observan durante la representación de un fragmento de esa obra que llega a su quinta temporada.

Thriller con tintes poéticos sobre un vínculo enfermizo

La cría ‘‘evoca lo grotesco de manera fársica: poderse reír de uno mismo, de sus maneras de amar y al mismo tiempo de deshacerse en ese amor. Meternos hasta lo más íntimo de la forma de ser y estar de una pareja, y reconocer sus amores, sus odios, y podernos reír de eso, me pareció genial del montaje”, refirió la actriz Anelvi Rivera, quien se incorporó al elenco para esta temporada.

Milleth Gómez apuntó que la reposición de esa puesta en escena es porque ha gustado mucho el ‘‘thriller con tintes poéticos y profundos sobre el amor y la devoción”.

Talancón relató que al escribir esa pieza dramatúrgica advirtió que ‘‘hablaba sobre las dinámicas patológicas que hay en la devoción que necesitamos; ese respaldo y ese alivio que puede ser muy destructivo de la creencia en un Dios o hacia la crianza del hijo, cuando se depositan todo el amor o la fe hacia una persona, un Dios, el trabajo, la mascota. Muchas veces se trata de eludir algún aspecto o hay un miedo del que se desea huir. Gran parte del dramatismo consiste en eso: algo que me da miedo y deposito ese sentimiento en algo de lo que soy fanático”.

Emmanuel Morales afirmó que el público ‘‘se va a ir agradecido de ver un montaje patético, agresivo, divertido, violento, pero que representa lo que hoy se hace en el teatro contemporáneo”. El actor participa en La cría, obra que en 2016 obtuvo el reconocimiento de la Agrupación de Críticos y Periodistas de Teatro a la mejor dramaturgia.

La cría se escenifica lunes y martes a las 20 horas en el sótano del Teatro del Bosque Julio Castillo (Paseo de la Reforma s/n, Chapultepec Polanco, estación Auditorio del Metro). La temporada concluirá el 10 de septiembre.