Miguel Ángel Félix Gallardo, llamado Jefe de Jefes, uno de los fundadores del cártel de Guadalajara y considerado entre los narcotraficantes más poderosos de México en los años 80 del siglo XX, busca recuperar su libertad. Recluido desde 1989 –la mayor parte del tiempo en prisiones de máxima seguridad–, con reportes de enfermedades crónico degenerativas muy desarrolladas, promovió un amparo en el que solicita la disminución de su sentencia.

El caso inició el pasado 17 de julio cuando la defensa de Félix Gallardo interpuso el recurso de amparo y el expediente recayó en el juzgado noveno de distrito con sede en la Ciudad de México. De acuerdo con las constancias del Poder Judicial de la Federación.

Félix Gallardo fundó el cártel de Guadalajara en la década de 1970 junto con Rafael Caro Quintero y Ernesto Fonseca Carrillo, juntos constituyeron la primera organización que se vinculó con traficantes colombianos, principalmente con los cárteles de Pablo Escobar y los hermanos Rodríguez Gacha.

El cártel de Guadalajara fue considerado por el gobierno de Estados Unidos como la mayor organización delictiva dedicada al tráfico de mariguana en su territorio, ya que el grupo mexicano controlaba el cultivo de cannabis y amapola en el llamado Triángulo Dorado que abarca los estados de Sinaloa, Durango y Chihuahua, considerado en la actualidad una de las mayores zonas de producción de esas dos plantas en territorio nacional.

El llamado Jefe de Jefes o El Padrino nació en 1946 en la comunidad de Bellavista, en el municipio de Culiacán, Sinaloa, y se integró al crimen organizado luego de formar parte de la extinta Policía Judicial Federal (actualmente esa corporación se denomina Policía Federal Ministerial y depende de la Fiscalía General de la República).

Los socios de Félix Gallardo –Caro Quintero y Ernesto Fonseca– fueron detenidos en 1985 tras el asesinato de Enrique Camarena Salazar, un elemento de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés).

Félix Gallardo fue aprehendido en abril de 1989, y con ello su organización se dividió dando origen a los cárteles de los hermanos Arellano Félix, el cártel de Juárez, mientras el cártel de Guadalajara quedó en manos de Joaquín El Chapo Guzmán y Héctor Luis El Güero Palma Salazar.

A pesar de que Félix Gallardo fue detenido en 1989, su sentencia definitiva a 40 años de prisión se dictó luego de 28 años de proceso, al ser encontrado culpable del asesinato del agente estadunidense.

En mayo pasado, un tribunal rechazó su solicitud para que se le otorgara el beneficio de la prisión domiciliaria bajo el argumento de que tiene más de 70 años, padece enfermedades crónico degenerativas que le afectan los sentidos del oído y la vista, además de sufrir limitaciones de movimiento.

En su intento por recuperar su libertad, la defensa de Gallardo promovió un recurso de revocación; sin embargo, el juzgado noveno se declaró incompetente y turnó el caso a un órgano en el estado de Jalisco. La resolución refiere que debe ser el primero en conocer la petición de amparo quien resuelva si es procedente o no disminuir la condena de 40 años.

El viernes pasado, el caso fue turnado a un tribunal para que defina la competencia y un juzgado entre al estudio del recurso.