Discriminar especies se asemeja al machismo y el racismo, opina Isabel Zapata // Escribió Una ballena es un país
Domingo 28 de julio de 2019, p. 3
El tema de los animales es ‘‘impostergable, como los del medio ambiente y de la conservación de la biodiversidad; ya no hay mucho tiempo para dejarlos de lado”, sostiene la escritora Isabel Zapata a propósito de su poemario Una ballena es un país, que presentó en la Casa Refugio Citlaltépetl.
La razón de escribir poemas sobre otras especies obedece a que le ‘‘gustan muchos los animales” y que ‘‘ya son asuntos impostergables en la discusión de nuestras generaciones, seres que estamos ahorita a cargo del planeta”, añade la autora en entrevista con La Jornada.
Ese libro, publicado por Almadía, está escrito en poesía, pues Zapata (CDMX, 1984) considera que ‘‘era una buena herramienta para generar este diálogo más allá de la academia, la filosofía o el activismo más duro. Permite construir vínculos empáticos entre el lector y aquello a lo que se refiere el poema. Conmueve y toca al lector, aunque tiene elementos de muchos otros géneros”.
La poeta y editora explica: “Hay un par de poemas en los que estoy más presente o en los que hablo de mis experiencias. También hay otros donde el proceso más que pasar a través de mí, fue más de investigación. Leí mucho sobre pulpos, ballenas y la perra Laika. Con ésta, intenté quitarme del escenario para poner en el centro al animal y tratar de encontrar su propia historia”.
Ejercicio de imaginación con la perra Laika
El libro de Isabel Zapata incluye poemas alusivos a la ballena, el tardígrado, el rinoceronte, el oso polar, el extinto tigre de Tasmania , un gorila que aprende lenguaje de señas y una longeva tortuga. ‘‘Quería hacer un retrato de la vida de algunos animales, de manera que no fuera a través del ojo humano o como un pretexto para hablar de nosotros”, refiere la también traductora.
En el caso de la perra Laika, primer animal que orbitó la Tierra y murió en el espacio, ‘‘hago un ejercicio de imaginar qué pensaría el científico que estuvo con ella a tantos años a la distancia de lo que se hacía en ese programa”.
‘‘El punto no es hacer una mirada moralista de ‘estuvo fatal, deberíamos avergonzarnos todos’, sino más bien sobre hasta dónde estamos dispuestos a llegar en el sacrificio de otras vidas que valen por sí mismas y no por la utilidad que tienen para nosotros’’. Afirma que el especismo ‘‘es una forma de discriminación a otras especies por pertenecer a otra especie. Si bien en una discusión más amplia y compleja hay muchísimos matices que tomar en cuenta; podría entrar, filosóficamente, en el mismo campo semántico que el machismo, el racismo y otras maneras de opresión.
‘‘No obstante que ahora elmovimiento animalista es más robusto que hace 50 años, se sigue sosteniendo la ideología de que el ser humano puede hacer lo que quiera y sigue habiendo muchísima crueldad e ignorancia sobre lo que pasa detrás de la pechuga de pollo que las personas compran en el supermercado.”
