En Bellas Artes, premiación y clausura de concurso de ballet infantil y juvenil
Sábado 27 de julio de 2019, p. 4
La gala de premiación y clausura del decimocuarto Concurso Nacional de Ballet Infantil y Juvenil se efectuó el jueves en el Palacio de Bellas Artes, con su sala Principal repleta de un público que vitoreaba a cada uno de los participantes.
Teresa Trujillo, subcoordinadora nacional de Danza del Instituto Nacional de Bellas Artes, expresó que niñas, niños y jóvenes de todo el país se presentaron en el certamen ‘‘haciendo gala de talento y pasión en la disciplina dancística”.
De allí que se pone de manifiesto la necesidad de que ‘‘desde temprana edad las jóvenes generaciones tengan un acercamiento a las expresiones artísticas y culturales para desarrollar todo su potencial y generar así posibilidades integradoras que les brinden las herramientas para fundir la técnica con la estética, promover la reflexión crítica y el disfrute de la diversidad”.
Un proceso de esta naturaleza, continuó Trujillo, tiene su punto clave en el trabajo de los profesores quienes, al comprometerse profundamente con el arte que transmiten a sus alumnos, los impulsan a dar cada vez más de sí mismos. Los maestros son quienes tienen ‘‘la gran tarea de que niñas, niños y jóvenes conozcan cómo se aprende por medio del arte y esto permea sus vidas para darles una nueva perspectiva que establezca vínculos fuertes con sus raíces, los proyecte hacia el mundo con una mirada diferente y les permita desenvolverse integralmente”.
Gran trabajo de docentes con sus alumnos
Claudia Irasema de la Parra, presidenta de la Sociedad Mexicana de Maestros de Danza, organizadora del certamen bianual, dijo que éste ‘‘crece y cada vez nos demuestra el talento que tenemos en México y el gran trabajo de nuestros maestros de danza. En cada concurso se ve un mejor nivel. En cada edición los chicos encuentran esos caminos que tratamos de conectar para que logren sus carreras”.
Esa competencia, dirigida a estudiantes de ballet entre ocho y 18 años, se desarrolla en cinco categorías, cada una con varios primeros, segundos y terceros lugares. Entre los galardonados se impuso la presencia de concursantes de Córdoba, Veracruz, y Monterrey, Nuevo León. También de Guadalajara, Jalisco. Muchos de los premiados recibieron una beca por algunas de las instituciones involucradas.
Se otorgaron menciones especiales ‘‘por su trabajo coreográfico sobresaliente” a Rosario Murillo, de Monterrey, y Josué Daniel Rebollo Morán, de Córdoba.
El premio Gustavo Herrera se entregó a los seleccionados de la segunda Muestra Coreográfica. Se trata de la obra On the table, de María Fernanda Sánchez Guerra en coautoría, de Culiacán, Sinaloa, interpretada por Mariana Chaidez García, y Bohemian rahpsody, de Josué Daniel Rebollo Morán de Córdoba.
El jurado estuvo integrado por Annik Bissonnette, Anna-Marie Holmes y Claudio Muñoz, quienes evaluaron técnica, musicalidad, estilo, figura, proyección artística y nivel. Bailarines prestigiados como Elisa Carrillo e Isaac Hernández han ganado este certamen que se creó en 1990 para apoyar y desarrollar la danza en México.