buena señaldel Ejecutivo, dice Coparmex
Viernes 26 de julio de 2019, p. 5
La apertura del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador al capital privado en la industria petroquímica es una primer señal alentadora
, señaló la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), aunque el organismo empresarial pidió que se reconsideren los contratos de asociación con Petróleos Mexicanos (Pemex) o el fracking.
Gustavo de Hoyos Walther, líder de la Coparmex, indicó en conferencia de prensa que el anuncio hecho el miércoles por el jefe del Ejecutivo federal después de reunirse con los presidentes de los consejos Coordinador Empresarial (CCE) y Mexicano de Negocios (CMN) es una primer señal alentadora
.
Comentó que espera que sea el inicio de un conjunto de decisiones que permitan retomar la participación a plenitud de la inversión privada –tanto doméstica como internacional– en distintas áreas del sector energético, el cual Coparmex considera el talón de Aquiles de la actual administración
, pues indicó que algunas de las determinaciones al respecto han minado la confianza empresarial.
Confió en que se solucione el conflicto entre la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y las constructoras de cinco gasoductos, pues de llegar a un arreglo sería una extraordinaria buena señal
, no sólo por el abastecimiento de gas natural, sino por su impacto en la lectura de la decisión del gobierno mexicano de ser respetuoso de las contrataciones que celebran.
Sin embargo, De Hoyos Walther dijo que espera se reinicien los contratos de asociación con Pemex, conocidos como farmouts, las rondas energéticas que quedaron suspendidas al iniciar la actual administración, y que el Ejecutivo reflexione sobre la aplicación de la técnica de fracking o compactación hidráuliuca para extraer hidrocarburos, pues consideró que ello puede disminuir la dependencia energética de Estados Unidos.
En materia de generación de electricidad, el líder de la Coparmex hizo un llamado a que se autoricen los proyectos de energías limpias, como la eólica, la fotovoltaica y las termoelécticas de ciclo combinado, y que las autoridades reflexionen sobre la posibilidad de abandonar la producción a través de hidroeléctricas.