El líder petrolero Carlos Romero Deschamps tendrá que comparecer ante el juez de control que, en su caso, haya librado la orden de captura en su contra en un plazo de tres días si no quiere perder la suspensión definitiva que le concedió el juzgado decimocuarto de distrito en el estado de México.

El Consejo de la Judicatura Federal (CJF) explicó ayer que la suspensión concedida al líder petrolero no obedeció a que se haya comprobado que exista en su contra una orden de captura, sino a que varios jueces señalados por el quejoso como responsables no rindieron el informe previo que el juez de distrito solicitó ni notificaron si existe el mandato judicial.

Conforme a derecho, esto obedece a que ante la falta de información el juzgador debe presumir ciertos los actos reclamados a las autoridades omisas y pronunciarse respecto a la suspensión solicitada, que es lo que hizo el juez de amparo.

El CJF agregó que esta medida cautelar no será efectiva si se comprueba que Romeros Deschamps es buscado por algún delito grave que merezca prisión oficiosa.

El juzgado decimocuarto otorgó una suspensión definitiva a Romero Deschamps contra cualquier orden de aprehensión o citatorio que autoridades federales hayan librado en su contra. La medida cautelar fue concedida porque el 11 de julio el dirigente sindical solicitó, con un amparo buscador, saber si la FGR solicitó algún mandamiento judicial en su contra.