La Universidad Nacional Autónoma de México cuenta con reglas claras para transferir a la industria, y a la sociedad en general, los productos, servicios y conocimientos que ella genera en todas las ramas del saber.

Juan Manuel Romero Ortega, titular de la Coordinación de Innovación y Desarrollo (CID), entidad responsable de realizar los lineamientos, explicó que esta transferencia de conocimiento se refiere, por ejemplo, al desarrollo de software, de cursos que se diseñan a la medida, de procedimientos y metodologías que resuelven algún problema y que pueden tener protección intelectual.

Para ofrecer estos servicios al exterior, con la debida protección técnica y legal, añadió, se crearon Los Lineamientos Generales sobre Transferencia de Tecnología y Conocimiento que son la plataforma más detallada y amplia con que cuenta la UNAM para ofrecer al exterior los conocimientos que se originan en sus aulas, laboratorios y oficinas.

La sociedad se beneficia de lo que hace la UNAM por sus egresados, por la formación de recursos humanos y también por sus servicios. Tenemos laboratorios de alto nivel para hacer análisis precisos, contamos con patentes que permiten transferir productos y metodologías a la industria, y realizamos estudios especializados con conocimientos que se generan aquí. Todo esto requiere una protección adecuada, afirmó Juan Manuel Romero Ortega en un comunicado de la UNAM.