Se impone 2-1 a Inglaterra
La inglesas fallan un penal y el VAR les anula un gol
Miércoles 3 de julio de 2019, p. a10
Lyon. Cuando Alex Morgan anotó el gol de la ventaja, la celebración fue delicada, pero demoledora. La delantera, quien ayer cumplió años, simuló que tomaba una taza de té en alusión a las rivales de Inglaterra. Las del conjunto de la rosa desperdiciaron un penal y sufrieron la anulación de un tanto por fuera de lugar y cayeron 2-1 ante Estados Unidos, que consiguió su tercera final consecutiva en el Mundial femenil y van en camino del bicampeonato.
Al final, Ellen White con lágrimas aplaudía por el despliegue de coraje y técnica que mostraron las inglesas, que no fue suficiente para alcanzar a la selección estadunidense, primera del listado de la FIFA; que ahora se medirá con las ganadoras de la otra semifinal, que disputarán hoy Holanda y Suecia.
Christen Press, quien jugó de inicio en el lugar de Megan Rapinoe, puso en ventaja a las estadunidenses en los albores del partido, pero un tanto de Ellen White igualó el marcador antes de que hubieran transcurrido 20 minutos.
El sexto tanto de Morgan en el torneo llegó antes del medio tiempo y en el día en que cumplió 30 años. No había marcado desde que consiguió cinco dianas en la paliza de 13-0 sobre Tailandia, con la que Estados Unidos comenzó su participación en Francia.
Fue también el sexto gol de White, pero Morgan se mantiene adelante para llevarse el Botín de Oro del torneo, con tres asistencias. White parecía que anotaba su séptimo tanto a los 69 minutos, pero después de acudir al VAR, se determinó que estaba en fuera de juego, lo que provocó el júbilo de los estadunidenses reunidos entre los 53 mil 512 espectadores dentro del Stade de Lyon.
El partido se volvió rabioso, con las jugadoras de ambos equipos mostrando un futbol exquisito y repleto de coraje. Incluso hubo momentos en los que el ansia de ganar volvió ríspida la lucha por la pelota.
A menos de 10 minutos del final, Becky Sauerbrunn había cometido una falta sobre White en el área.
Una revisión del VAR derivó en penal favorable para Inglaterra. La capitana Steph Houghton fue la encargada de ejecutar el tiro. Enfiló al manchón pero disparó desganada, quizás con nervios incontrolables, porque el tiro sin dirección ni fuerza fue atajado por Alyssa Naeher con un buen lance a los 84 minutos.
Fue el primer penal atajado por una portera estadunidense durante el tiempo regular en la Copa del Mundo. Tras el silbatazo final, las jugadoras felicitaron de manera tumultuaria a Naeher frente al arco. Morgan, con 30 años recién cumplidos recibió en los brazos a una efusiva Megan Rapinoe, ambas referentes de la selección de la barra y las estrellas, y también estrellas que han utilizado su fama para amplificar la voz contra las políticas antimigrantes y homofóbicas del presidente Donald Trump. Se veían pletóricas, alegres, porque pese a los comentarios descorteses del mandatario las estaduniden-ses están de nuevo en una final.
Rapinoe, quien había anotado dos goles en cada uno de los recientes dos duelos, no jugó, sin que la federación estadunidense revelara el motivo. Aunque ha quedado en evidencia su posición política al negarse a entonar el himno de su país antes de los partidos, como muestra de solidaridad ante la brutalidad policiaca y el racismo.
Estados Unidos ha avanzado a las semifinales de los ocho mundiales y ha ganado el trofeo tres veces.