Cerca de cumplir 82 años y antes del anuncio de diversas medidas relacionadas a su futuro, el Salón Los Ángeles corroborará este domingo por qué es referente cultural de la Ciudad de México al recibir en sus instalaciones a la mexicana Elisa Carrillo, primera bailarina del Ballet Estatal de Berlín.

En las paredes de este espacio quedarán, de manera permanente, las zapatillas de ballet de Carrillo, quien también impartirá una charla, firmará el libro de personalidades y bailará con los ritmos afrocaribeños que inundan este lugar, explicó Miguel Nieto, quien está al frente del salón desde hace casi 47 años.

El año pasado, Carrillo organizó una clase magistral de ballet dedicada a alumnos de esta disciplina en la Ciudad de México. En esa ocasión nos dejó sus zapatillas autografiadas y no habíamos tenido oportunidad de verla. Ahora que regresa para presentarse, el próximo martes en el Auditorio Nacional, aceptó venir a develar la instalación de su calzado.

Nieto detalló: Durante todo este año vamos a hacer diversas actividades con exponentes de música afroantillana, como el danzón, el son cubano, la cumbia y todos los ritmos afroamericanos que promovemos aquí y que genéricamente llamamos rumba. Serán parte de nuestro aniversario 82 que se cumple el 2 de agosto.

Para el festejo tendremos buen baile amenizado con las sonoras Santanera y Dinamita; además, participarán Héctor Infanzón, La Nueva Nostalgia, El Son 14 y la Orquesta de Arturo Núñez. Por cierto, esta última acompañó a Benny Moré mucho tiempo y el cantante cumpliría 100 años este 2019.

Desde sus orígenes, el Salón Los Ángeles es de naturaleza popular. Siempre está abierto a todas las expresiones de cultura; incluso, hemos tenido muestras de arte contemporáneo; además, vamos a impulsar actividades apoyados con personajes de rango internacional que nos van a ayudar con su presencia, comentarios y orientación, como Gustavo Dudamel o Arturo Márquez.

Los Ángeles, a lo largo de casi 82 años, se fue transformando, y hemos pasado por muchas cosas. Hemos apoyado causas populares; además, los partidos políticos de izquierda han organizado en este recinto alguna actividad, asamblea o baile. También es evidente su integración al Centro de la Ciudad de México, por ser considerado arte de la gente de Tepito y la colonia Guerrero.

Incluso, “es un salón de baile donde, por primera vez, una mujer se rehusó a bailar y dijo ‘no, gracias’. En un cabaret eso no era posible porque iban a bailar a cambio de una cuota o pago. En cambio, en Los Ángeles y en otros sitios populares de la época se tenían códigos de vestir y de baile. Estos lugares eran la expresión urbana por excelencia de los años 30 y 40”.

Actitud de avanzada

Así fue como tuvimos que transformarnos porque no podemos considerar que la escena del entretenimiento actual es similar a la de aquellos años; el aspecto tecnológico también ha avanzado y tenemos la obligación de mantener una actitud de avanzada.

Por esta razón, a partir del 2 de agosto y hasta 2020, se anunciarán e implementarán una serie de medidas para lograr que el Salón perdure una vez que la actual administración del recinto haya muerto, lo cual está próximo.

De cara a la modernidad y con nuestro espíritu festivo original tenemos que ofrecer un modelo de entretenimiento y cultura popular que esté acorde con los tiempos, dijo Miguel Nieto quien enfatizó: Vamos a hacer lo necesario para que el salón sobreviva.

El recinto de la Guerrero siempre ha estado en situación crítica y en la mira de alguien para ser atacado o para hacernos las cosas un poco más divertidas. Aquí nunca nos aburrimos porque siempre tenemos algo que resolver.

Sin duda, puntualizó Nieto, hemos sido necios en seguir promoviendo música como el mambo, el cha cha cha, el danzón, la salsa, la cumbia, el son cubano, todo lo que tiene que ver con la negritud con esa mezcla de alegría y buen humor, sin omitir las historias de la gente de a pie, que cada martes o domingo viene a bailar y a encontrar un remanso de paz en sus vidas.