Los efectivos del Ejército y la Marina que formen parte de la Guardia Nacional se someterán a la disciplina, fuero civil, cadena de mando, y conservarán su grado, rango y todas sus prestaciones tanto durante su actividad en esta nueva corporación, y también al ser reasignados a sus instituciones de origen, señala un decreto emitido por el presidente Andrés Manuel López Obrador, publicado en el Diario Oficial de la Federación.

En el acuerdo se menciona que los integrantes de las policías militar y naval que sean asignados a la Guardia Nacional emplearán armamento, municiones y equipo de cargo con los que estén dotados, debiendo realizarse la transferencia en los inventarios. Se instruye a las secretarías de Seguridad y Protección Ciudadana, de Defensa Nacional y de Marina para que realicen los trámites.

Los elementos de las fuerzas armadas que sean asignados a la Guardia Nacional conservarán grado, rango y todas sus prestaciones y cuando regresen a su cuerpo de origen, se respetarán los derechos con que contaban al momento de ser asignados, así como el reconocimiento del tiempo de servicio en esta última para efectos de su antigüedad y de los ascensos a que pueda aspirar.

Asimismo, el decreto señala que Los estudios técnicos y profesionales que realicen durante su periodo de servicio en la guardia serán tomados en cuenta para efectos de promoción en su institución armada de origen.

Respecto de la policía federal, se señala que a la Guardia Nacional pasarán los elementos que conforman las divisiones de Fuerzas Federales y de Gendarmería.