Roma. El papa Francisco expresó ayer una inmensa tristeza por la muerte este fin de semana del salvadoreño Óscar Alberto Martínez Ramírez y su hija Valeria, de casi dos años, en el río Bravo, en su intento por alcanzar Estados Unidos.

En una desgarradora fotografía tomada por la periodista Julia Le Duc y publicada en La Jornada, que dio la vuelta al mundo, se aprecia el brazo de la pequeña Valeria alrededor del cuello de su padre, un indicio de que se aferró a él en sus últimos momentos.

La imagen, como bien expresó The New York Times, es un retrato de la desesperación, y ha tenido la misma atención que la foto del niño migrante Aylan Kurdi, quien perdió la vida en el mar Mediterráneo y cuyo cuerpo fue arrastrado hasta una playa en Turquía en 2015.

El director interino de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Alessandro Gisotti, aseguró que Jorge Mario Bergoglio sintió una inmensa tristeza al ver “la imagen del papá y de su hijita ahogados en el río Grande mientras intentaban cruzar la frontera entre México y Estados Unidos.

El Papa está profundamente entristecido por su muerte, reza por ellos y por todos los migrantes que perdieron la vida tratando de escapar de la guerra y la miseria, agregó Gisotto.

Según el relato de Le Duc recogido por Vatican News, Martínez esperó asilo durante dos años. El domingo, junto con la pequeña Valeria y su esposa Tania Vanessa Ávalos, emprendió el viaje y quiso cruzar el río para entrar en Brownsville, Texas. El padre y la pequeña lograron llegar a la orilla, pero su mujer se quedó atrás y Martínez volvió para buscarla. Dejó a la pequeña en la orilla, pero ésta se lanzó detrás de él y fueron arrastrados por la corriente.

Felicita a mexicanos por su solidaridad

En su audiencia general de ayer, el Papa argentino felicitó a los mexicanos por ser tan acogedores con los migrantes. Pidamos al Espíritu Santo para que nuestras comunidades sean acogedoras, sean solidarias, viviendo la liturgia como encuentro de Dios y con los hermanos. Y yo quiero felicitar a los mexicanos porque son tan acogedores con los migrantes. Que Dios se los pague. Gracias, subrayó. El pontífice dedicó estas palabras en español a un grupo de peregrinos de Tlalnepan-tla, acompañados de su arzobispo, José Antonio Fernández Hurtado.

Francisco ha hecho de la defensa de los migrantes y los refugiados uno de los pilares de su pontificado y se ha enfrentado en varias ocasiones al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por sus políticas migratorias. El 27 de abril de este año anunció una donación de 500 mil dólares para ayudar a los migrantes en México al ofrecer asistencia a proyectos locales que les brindan comida y alojamiento.