La autora Socorro Venegas, en su libro La memoria donde ardía, rinde homenaje a las personas sobrevivientes. Ese trabajo editorial fue presentado la noche del martes en la Ciudad de México.

Reúne 19 cuentos en los que la narradora reconstruye el pasado y se adentra en los recuerdos desde una perspectiva poética y perturbadora desde el dolor, la angustia y la soledad.

‘‘Es un libro que habla de la pérdida, no necesariamente física; y de cómo los seres humanos podemos reconstruirnos”, aclaró Venegas sobre esa obra publicada por el sello español Páginas de Espuma, cuyo título fue tomado de un verso del soneto Amor constante más allá de la muerte, de Francisco de Quevedo.

En la presentación, efectuada en la librería Gandhi de Miguel Ángel de Quevedo, Socorro Venegas estuvo acompañada por sus colegas Verónica Murguía y Alberto Chimal, además de los narradores orales Nacho Casas y Janet Pankowsky, quienes hicieron una lectura dramatizada de algunos relatos.

Capacidad para enunciar estados del alma

De acuerdo con Alberto Chimal, La memoria donde ardía posiciona a Socorro Venegas como una de las autoras más relevantes en este momento tan importante y venturoso para las escritoras mexicanas.

‘‘La coloca como una narradora muy especial que tiene una sensibilidad enorme y profunda, capaz de enunciar numerosos estados del alma humana y muchos de sus matices y delicadezas”, destacó el cuentista.

Verónica Murguía destacó que el libro de Venegas es una apelación a la memoria y a los recuerdos, así como un compendio de retacería de los temas que obsesionan a su autora, entre ellos la maternidad y la infancia, aunque tratados de manera poco convencional.

‘‘Es un juego de contrarios e inversiones de las cosas que damos por sentadas”, refirió Murguía, quien explicó quepara Socorro Venegas dar a luz significa quedarse con un hueco en el cuerpo y en la penumbra total o que la infancia no es un momento eterno de felicidad, sino que también hay horrory miedo.