Jueves 20 de junio de 2019, p. 4
La caída de 88 por ciento del empleo formal en mayo respecto del mismo periodo de 2018 es reflejo de la escasa inversión, como consecuencia de la falta de confianza de los inversionistas y la austeridad aplicada en el gasto público, afirmaron especialistas en economía, quienes advirtieron de la posibilidad de que el indicador siga descendiendo en lo que resta del año.
Ignacio Martínez, coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (LACEN), consideró que la baja del empleo es resultado del comportamiento de la economía, pues en marzo la inversión fija bruta –principal indicador que arroja el comportamiento que está realizando el empresario en torno a la capitalización del equipo y maquinaria de la empresa– tuvo una reducción de 3 por ciento, mientras que la de la producción industrial fue de 1.3 por ciento y la tasa de desempleo pasó en abril de 3.4 a 3.6 por ciento.
No hay confianza por parte del empresario y también del consumidor
, aseveró. Es un signo volátil que tiene la economía de que no hay perspectivas halagüeñas en cuanto al comportamiento de la economía
, añadió.
Explicó que al segundo trimestre de 2018 el crecimiento de la economía fue de 2.6 por ciento, mientras que para el mismo periodo LACEN ha calculado que sea de 0.5 por ciento, lo cual puede indicar una caída de 420 por ciento.
José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico, indicó que el mercado laboral en México ya está sufriendo las consecuencias de la desaceleración económica
, que deriva de la baja actividad productiva en la Ciudad de México, estado de México, Jalisco, Nuevo León o Guanajuato, así como la actividad industrial negativa.
Destacó que la falta de actividad económica junto con la austeridad en el gasto público están repercutiendo en la falta de creación de oportunidades de trabajo. La desaceleración está llegando a la vida diaria de los hogares mexicanos bajo la forma de la falta de empleo
.
Indicó que si bien es positivo el gasto de gobierno, no alcanza para generar el empleo que requieren todos los mexicanos, pues para hacer crecer la economía se requiere de inversión productiva y eso se dará con un programa emergente.
Ernesto O’Farril Santoscoy, presidente de la Comisión de Análisis Económico del Instituto Mexicano de Contadores Públicos, comentó que la cifra negativa en la creación de empleo indica que algo no se está haciendo bien. Lo que nosotros podemos intuir es una contracción del gasto de inversión, tanto pública como privada, pero lo más importante, por su dimensión, es la privada, porque es 85 por ciento del total
.
Subrayó que en ese instituto estiman que para este año el gasto de inversión tendrá una contracción de 8 por ciento, pero al cierre del primer trimestre la contracción fue de 6 por ciento.
En entrevistas por separado, los tres especialistas consideraron posible que la tendencia en la creación de empleos formales ante el Instituto Mexicano del Seguro Social siga a la baja en lo que resta del año.
De la Cruz indicó que si no se revierte la desaceleración y se sigue profundizando, sí habrá una consecuencia en la creación de empleo, que incluso se puede acentuar en junio y julio. O’Farril Santoscoy indicó que es previsible que siga cayendo el empleo a no ser que suceda un milagro y de la noche a la mañana el sentimiento de confianza de los inversionistas cambiare
.