La amenaza de imponer aranceles a las exportaciones mexicanas a cambio de un cerco a los migrantes en la frontera sur de México fue una presión muy clara del mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, aseveró el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas.

Entrevistado antes de su participación en la Cumbre de Libertad de Prensa en México, el funcionario federal se refirió a la restructuración de la estrategia migratoria –más enfocada a la seguridad tras las negociaciones entre autoridades de ambos países– y subrayó que México debe seguir garantizando los derechos de las personas en contexto de movilidad, mediante una migración ordenada, regulada y segura; además que se pondrá énfasis en el combate a los traficantes de personas.

Hay una coyuntura de tensión con el gobierno de Estados Unidos. (Por la que) lejos de disminuir, habrá un crecimiento significativo de población migrante en nuestro país, porque (los solicitantes de asilo) tendrán que esperar en México la resolución de las cortes estadunidenses.

Alertó que en meses recientes se ha dado un cambio en el patrón del fenómeno migratorio. De entrada, enfatizó, tan sólo en el primer semestre de este año se ha registrado el ingreso irregular de cerca de 400 mil extranjeros, el mismo número que se tuvo durante todo 2018.

La composición de los grupos migratorios también se ha transformado. Ya no son hombres y mujeres mayores de edad, hoy vienen familias, con un número significativo de menores, que supera 35 por ciento de la población migrante, además que ya se trata sólo de personas provenientes de Centroamérica, sino que se tiene un flujo de habitantes de al menos 25 naciones, incluidas de África y Asia.

Sobre el papel que jugará la Guardia Nacional en la estrategia migratoria, Encinas aseveró que esta actuación está incluida en la ley, se realizará en coordinación con el Instituto Nacional de Migración y en apego al respeto a los derechos humanos de los extranjeros. Descartó que estas acciones se conviertan en un muro para contener el ingreso de los migrantes.

Un punto que se tiene que rescatar, dijo, es retomar la política exterior mexicana garante del derecho de refugio y asilo. Hay que dar prioridad junto con los temas del desarrollo de la región y de la integración a la vida cotidiana de esa población en nuestro país.

Este miércoles, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, acudirá a la sede de Naciones Unidas en Nueva York, donde se reunirá con el secretario general del organismo, António Guterres, para abordar el tema en la región. El encuentro se dará luego que el canciller reclamara a esa instancia internacional su silencio ante las amenazas de Trump.

Por su parte, la cancillería informó ayer que el subsecretario para América Latina y el Caribe, Maximiliano Reyes, se reunió el lunes en Tapachula, Chiapas, con embajadores y cónsules de El Salvador, Honduras y Guatemala, como parte del Mecanismo de Diálogo y Coordinación entre los cuatro países para dar seguimiento al tema migratorio.