Tras la detención de Alonso Ancira Elizondo, presidente del consejo de administración de Altos Hornos de México (AHMSA), en España, la empresa aseguró que sus operaciones se mantendrán y calificó de ilegales y arbitrarias las acciones que se han emprendido desde el pasado lunes.

La compañía confirmó la tarde de ayer que el directivo de la siderúrgica fue detenido en España por razones que hasta el momento se desconocen. Indicó que AHMSA activó de inmediato los protocolos necesarios para asegurar la continuidad de sus operaciones y está a la espera de una respuesta de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) con la finalidad de que sean descongeladas las cuentas bancarias.

Aunque el origen del conflicto es la compra de Agronitrogenados a AHMSA por Petróleos Mexicanos (Pemex), la siderúrgica indicó que desconoce el sustento del congelamiento de las cuentas bancarias y calificó las acciones emprendidas en su contra de ilegales y arbitrarias, pues no ha habido una actuación dolosa por parte de la compañía o de su presidente, ni en momento alguno se ha requerido por parte de una autoridad aclarar algún acto financiero.

En días recientes, en el contexto de la 71 asamblea de la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero (Canacero), a la que pertenece AHMSA, Ancira Elizondo detalló que la empresa había tenido un impacto negativo de 450 millones de dólares debido al arancel de 25 por ciento aplicado al acero por Estados Unidos mediante la sección 232 de la Ley Comercial de 1962.

Además paró dos hornos, uno a 40 y otro a 70 por ciento, así como el eléctrico en su totalidad, lo cual tuvo un impacto en la producción de 80 mil toneladas menos de acero.

En la actualidad, la siderúrgica está en proceso de terminar de saldar una deuda de 600 millones de dólares adquirida en los años 90, los cuales se están pagando por medio de fideicomisos que se encuentran en Citibanamex, para los acreedores estadunidenses, y en Actinver, para los mexicanos.

Ancira Elizondo descartó que la empresa vuelva a cotizar en la bolsa de valores. Explicó que para ello se necesita que los números de la compañía estén bien y no lo están a causa del impacto provocado por los aranceles por la aplicación de la sección 232, el cambio de régimen en el país –el cual están revisando– y la suspensión de inversiones. En ese momento, el directivo de la siderúrgica, que tiene 13 por ciento del mercado de acero nacional, consideró que por la gravedad de los problemas ya nada más nos faltaba que nos haga pipí un perro.