En las próximas semanas, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) tendrá listo el protocolo para revisar los contratos colectivos de trabajo que tienen las empresas con sindicatos, con la finalidad de validar que estén aprobados por los trabajadores, como establece la reforma laboral.

En el Foro nacional Index: nuevo modelo de relaciones laborales, la titular de la dependencia, Luisa María Alcalde, explicó que de no demostrarse la aprobación de los asalariados, aunque ya no se tenga un contrato colectivo no se eliminan las prestaciones que contenga.

Añadió que actualmente para firmar un documento de ese tipo no se requiere consultar a los trabajadores si están de acuerdo con que un gremio los represente, y con la reforma laboral se establece que éste debe tramitar una constancia ante el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral con la que se valida que al menos 30 por ciento de los empleados lo aprueba.

Frente a empresarios de la industria maquiladora y manufactura de exportación, la titular de la STPS destacó que ya se está caminando en la aplicación de los cambios en materia del trabajo.

Indicó que esperan que el 31 de mayo sesione el Consejo de Coordinación para la implementación de la reforma, en el que estarán representados gobernadores, secretarios de Trabajo estatales, el Poder Judicial Federal y los locales, así como la Secretaría de Hacienda.

Por su parte, los empresarios manifestaron que no les alarman los cambios aprobados en esta reforma. Jesús Alberto Zarazúa Perea, director del Comité Nacional Laboral de Index, expuso: tenemos en nuestras manos una enorme oportunidad de construir un nuevo modelo de relaciones laborales que tengan como objetivo no sólo sostener,sino incrementar la competitividad del país y lograr mayor bienestar para nuestros empleados.

Celebró la creación del Centro de Conciliación y Registro Laboral, los tribunales laborales y la democracia sindical que se establecen en la reforma. Señaló que 20 por ciento de las industrias de este sector tienen un contrato celebrado con sindicatos.

En tanto, el sector obrero manifestó sus dudas respeto a la aplicación de la reforma laboral. Fernando González Salgado, de la Confederación de Trabajadores de México, reiteró que los cambios no son impuestos por necesidades propias del país, sino de las relaciones comerciales internacionales.